El uso de la estimulación cerebral profunda (ECP) se ha extendido recientemente para el tratamiento de trastornos psiquiátricos resistentes, pero la experiencia en pacientes con trastornos relacionados con la esquizofrenia y el trastorno bipolar (TB) es escasa.
Método
Realizamos un estudio longitudinal observacional de un año de duración para evaluar los efecto...
El uso de la estimulación cerebral profunda (ECP) se ha extendido recientemente para el tratamiento de trastornos psiquiátricos resistentes, pero la experiencia en pacientes con trastornos relacionados con la esquizofrenia y el trastorno bipolar (TB) es escasa.
Método
Realizamos un estudio longitudinal observacional de un año de duración para evaluar los efectos de la estimulación cerebral profunda en cuatro pacientes resistentes al tratamiento con esquizofrenia, trastorno esquizoafectivo y trastorno bipolar, incluidos en un protocolo piloto de último recurso. Los pacientes fueron monitoreados digitalmente para evaluar objetivamente los cambios de conducta.
Resultados
Después de un año de su inicio, la ECP del núcleo accumbens (en los sujetos N2, N3 y N4) y de la corteza cingulada anterior subgenual (en N1) produjo una mejoría clínica significativa, asociada con disminuciones en la Impresión Clínica Global ( de 5, 25±0, 5 a 3, 5±1, p=0, 035) y en la escala de depresión de Hamilton (puntuaciones HADRS, de 14, 5±6, 56 a 1, 5±1. 29, p=0, 020).
Observamos una respuesta terapéutica notable y duradera en dos pacientes de esta cohorte (N1 y N3), un alivio clínicamente relevante en un tercero (N2) y una falta de respuesta significativa en el último (N4).
Las sesiones de terapia electroconvulsiva de mantenimiento pudieron suspenderse en los tres pacientes que respondieron a la ECP (N1-3). No hubo efectos secundarios ni cambios relevantes en el funcionamiento cognitivo. Hubo diferencias relevantes entre la actividad física y el tiempo de sueño entre los cuatro participantes.
Conclusiones
Estos resultados sugieren evidencia inicial de que la estimulación cerebral profunda puede ser una alternativa eficaz y segura para el tratamiento de formas complejas y resistentes de trastornos relacionados con la esquizofrenia y el trastorno bipolar.
La monitorización digital puede ayudar a captar medidas objetivas de los cambios de conducta después de la intervención.
Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original:https://www.elsevier.es/