La actividad física modera la relación entre la gravedad de los síntomas del TEPT y la toma de decisiones de aproximación-evitación de conflictos

La evitación de contextos potencialmente peligrosos cumple una función adaptativa esencial para la supervivencia —denominada evitación adaptativa—. Sin embargo, cuando esta tendencia se generaliza a contextos seguros, se convierte en evitación desadaptativa, la cual puede tener efectos negativos en la salud mental, incluyendo una reducción en la capacidad de experimentar recompensas y una mayor vulnerabilidad a los trastornos de ansiedad.

Las decisiones que implican buscar una recompensa en presencia de una amenaza, o bien evitar la amenaza a costa de renunciar a una ganancia, constituyen lo que se conoce como un conflicto de acercamiento-evitación (AAC, por sus siglas en inglés). Se ha planteado que este tipo de conflicto puede estar sesgado en adultos expuestos a traumas, especialmente en aquellos con trastorno de estrés postraumático (TEPT). No obstante, solo dos estudios conductuales previos habían examinado este fenómeno en adultos con TEPT o con síntomas relacionados.

Por otro lado, se sabe que mayores niveles de actividad física (AF) se asocian con mejor desempeño cognitivo en tareas de toma de decisiones basadas en recompensas. Sin embargo, no se conocía si la AF podría proteger frente a sesgos de evitación excesiva o si, por el contrario, podría reducir la tendencia a evitar amenazas sacrificando recompensas potenciales.

Método

El presente estudio aplicó una tarea conductual de conflicto de acercamiento-evitación relacionada con trauma a 93 adultos expuestos a experiencias traumáticas, con niveles variables de severidad de síntomas de TEPT. La tarea constó de 150 ensayos divididos en dos fases:

- Fase congruente: la opción con mayor probabilidad de obtener una recompensa positiva era también la menos probable de presentar una imagen relacionada con el trauma.

- Fase de conflicto: la opción con mayor probabilidad de obtener recompensa era, a la vez, la más probable de mostrar una imagen amenazante.

Resultados

Los análisis mediante modelos lineales de efectos mixtos mostraron que la actividad física moderó la relación entre la severidad de los síntomas de TEPT y el desempeño en el conflicto AAC. En personas con bajos niveles de actividad física, se observó una mayor relación positiva entre la severidad del TEPT y el conflicto, es decir, mayor evitación del riesgo y renuncia a la recompensa. En cambio, con niveles más altos de actividad física, esta relación se volvió negativa, reflejando menor conflicto y mayor disposición a buscar recompensas incluso en presencia de amenaza.

Conclusiones

Estos resultados sugieren que una mayor actividad física podría actuar como un factor protector frente a los sesgos cognitivos característicos del TEPT, fomentando una conducta más orientada a metas y una mayor capacidad para enfrentar amenazas sin renunciar a la recompensa.

En conjunto, los hallazgos aportan evidencia de que la actividad física regular puede modular los mecanismos de aproximación y evitación, ofreciendo implicaciones clínicas relevantes para el tratamiento del TEPT y otros trastornos relacionados con el trauma.

Resumen modificado por Cibermedicina

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