Autor/autores:
Yanping Bai, Zhen Zeng, Xiaoyu Li...(et.al)
Investigar la relación entre la depresión al principio del embarazo y la calidad del sueño a mitad del embarazo, y explorar si los trastornos del sueño predicen de forma independiente la depresión durante el período perinatal en mujeres con o sin depresión al principio del embarazo. Métodos Los datos se recopilaron en 7 momentos desde las 1...
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Investigar la relación entre la depresión al principio del embarazo y la calidad del sueño a mitad del embarazo, y explorar si los trastornos del sueño predicen de forma independiente la depresión durante el período perinatal en mujeres con o sin depresión al principio del embarazo.
Los datos se recopilaron en 7 momentos desde las 12 semanas de embarazo hasta las 6 semanas posparto. Se utilizaron regresión logística múltiple y análisis de supervivencia para explorar la relación entre la calidad del sueño en la mitad del embarazo y la depresión perinatal en mujeres con o sin depresión al principio del embarazo.
Se incluyeron 390 mujeres. Las mujeres con depresión al principio del embarazo tenían más probabilidades de sufrir trastornos del sueño y depresión perinatal.
Las mujeres con trastornos del sueño tenían un mayor riesgo de depresión perinatal en comparación con las mujeres sin trastornos del sueño a mitad del embarazo.
El análisis estratificado basado en si estaba deprimida a las 12 semanas de embarazo encontró que entre las mujeres sin depresión, aquellas con trastornos del sueño a mitad del embarazo tenían más probabilidades de tener depresión perinatal posterior y aparecían antes; mientras que, entre las mujeres con depresión, los trastornos del sueño a mitad del embarazo no fueron un predictor de depresión perinatal posterior.
Las altas tasas de visitas perdidas pueden provocar un sesgo en la muestra, ya que la depresión y la calidad del sueño se evalúan mediante autoinforme.
Las mujeres con depresión al principio del embarazo tienen más probabilidades de tener trastornos del sueño a mitad del embarazo.
Existe una fuerte correlación entre la calidad del sueño a mitad del embarazo y la depresión perinatal entre mujeres sin depresión al principio del embarazo.
La detección y la intervención de rutina para los trastornos del sueño deben ser una prioridad en la atención perinatal para reducir la incidencia de la depresión perinatal.
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