El trastorno de hiperactividad, normalmente conocido como TDAH, es un factor de riesgo independiente para varios problemas de salud mental comunes y graves, según una investigación publicada en la revista de acceso abierto ´BMJ Mental Health´.
Se asocia con la depresión mayor, el trastorno de estrés postraumático, el trastorno alimentario anorexia nerviosa y los intentos de suicidio, muestran los resultados, lo que lleva a los investigadores a recomendar la vigilancia por parte de los profesionales de la salud en un intento de prevenir estos trastornos más adelante.
El trastorno por déficit de atención con hiperactividad es un trastorno del neurodesarrollo que afecta a niños y adolescentes y que se prolonga hasta la edad adulta en unos dos tercios de los casos. Se calcula que su prevalencia en el mundo ronda el 5% en niños y adolescentes y el 2,5% en adultos.
Se le ha relacionado con trastornos del estado de ánimo y de ansiedad en estudios observacionales, pero se desconoce si está asociado causalmente con otras enfermedades mentales.
Para tratar de averiguarlo, los investigadores utilizaron la aleatorización mendeliana, una técnica que utiliza variantes genéticas como sustitutos de un factor de riesgo concreto --en este estudio, el TDAH-- para obtener pruebas genéticas que respalden un resultado concreto, en este caso 7 problemas comunes de salud mental: depresión clínica mayor, trastorno bipolar, trastorno de ansiedad, esquizofrenia, trastorno de estrés postraumático, anorexia nerviosa y al menos un intento de suicidio.
Los investigadores utilizaron inicialmente la técnica para establecer posibles vínculos entre el TDAH y los 7 trastornos. A continuación, la utilizaron para ver si los trastornos asociados al TDAH podían ser potencialmente responsables de los efectos detectados en el primer análisis. Por último, agruparon los datos de ambos análisis para calcular los efectos directos e indirectos del TDAH.
Los resultados del análisis mostraron que no había pruebas de una relación causal entre el TDAH y el trastorno bipolar, la ansiedad o la esquizofrenia, pero sí había pruebas de una relación causal con un mayor riesgo de anorexia nerviosa (28%), y pruebas de que el TDAH causaba (9% de mayor riesgo), y era causado por (76% de mayor riesgo), depresión clínica mayor.Y tras ajustar la influencia de la depresión mayor, surgió una asociación causal directa tanto con el intento de suicidio (30% de aumento del riesgo) como con el TEPT (18% de aumento del riesgo).
Los investigadores advierten de que, aunque la aleatorización mendeliana es menos propensa que los estudios observacionales a la influencia de factores no medidos y a la causalidad inversa --por la que el TDAH podría ser consecuencia de los diversos trastornos estudiados y no al revés--, no está exenta de limitaciones.
Por ejemplo, el mismo gen puede estar asociado a distintos rasgos, lo que dificulta la determinación del efecto causal pertinente, señalan. Sólo se incluyó a personas de ascendencia europea, por lo que los resultados podrían no ser aplicables a otras etnias.
No obstante, los investigadores concluyen que sus hallazgos deberían animar a los médicos a ser más proactivos a la hora de tratar a las personas con TDAH.
"Este estudio abre nuevas perspectivas sobre los caminos entre los trastornos psiquiátricos. Así pues, en la práctica clínica, los pacientes con TDAH deberían ser vigilados para detectar los trastornos psiquiátricos incluidos en este estudio y, en caso necesario, deberían iniciarse medidas preventivas", escriben.