Estrés laboral y familiar como predictores del consumo riesgoso de alcohol

Objetivos

El presente estudio tuvo como propósito examinar si los factores de estrés relacionados con el trabajo y la familia incrementan el riesgo de desarrollar un consumo de alcohol riesgoso en personas inicialmente clasificadas como bebedores de bajo riesgo. Asimismo, se exploró el papel moderador del sexo y del apoyo social, con el fin de comprender mejor las diferencias individuales en la vulnerabilidad al abuso de alcohol.

Métodos

Se incluyó una cohorte de 4046 personas de entre 25 y 55 años, residentes y trabajadoras en Estocolmo, sin antecedentes de consumo problemático de alcohol. Todos los participantes completaron el cuestionario del estudio “Salud mental, trabajo y relaciones sociales” entre 1998–2000 y 2001–2003, el cual evaluó estresores laborales y familiares como variables de exposición.

El seguimiento se extendió hasta el año 2010, y el consumo riesgoso de alcohol se determinó mediante el Alcohol Use Disorder Identification Test (AUDIT). Se calcularon ponderaciones por deserción selectiva y se aplicaron modelos de regresión logística, tanto crudos como ajustados por variables sociodemográficas, de salud y de estrés basal, para estimar razones de momios (OR) con sus respectivos intervalos de confianza (IC) del 95 %. Los análisis se estratificaron por sexo y nivel de apoyo social.

Resultados

Los resultados mostraron que el riesgo crudo de consumo riesgoso de alcohol fue de 1, 28 (IC 95 %: 0, 88–1, 88) para quienes reportaron estresores laborales y de 1, 48 (IC 95 %: 1, 05–2, 08) para aquellos con estresores familiares, en comparación con las personas sin tales exposiciones. La asociación entre los estresores familiares y el consumo riesgoso fue más marcada en las mujeres (OR crudo = 1, 66, IC 95 %: 1, 02–2, 71) y en quienes reportaron bajo apoyo social (OR crudo = 2, 06, IC 95 %: 1, 17–3, 62). Sin embargo, al ajustar por historial previo de estrés laboral y familiar, la magnitud de las asociaciones se redujo, lo que sugiere que los efectos acumulativos del estrés pueden desempeñar un papel central en el desarrollo de patrones de consumo problemático.

Conclusiones

Este estudio longitudinal de base poblacional encontró que las personas expuestas a estresores familiares presentan una mayor vulnerabilidad a transitar hacia un consumo riesgoso de alcohol, en especial las mujeres y aquellas con escaso apoyo social.

Estos hallazgos resaltan la importancia de intervenciones preventivas que fortalezcan los recursos sociales y familiares, así como de estrategias de manejo del estrés en el ámbito laboral y doméstico, con el objetivo de reducir la progresión hacia el consumo problemático de alcohol en la población general.

Resumen modificado por Cibermedicina

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