La coerción en psiquiatría no ha disfrutado de la atención que merece, ni históricamente, ni en el momento presente. Y, sin embargo, el empleo de medios coercitivos en la práctica psiquiátrica incide sobre uno de los bienes supremos del ser humano, la libertad. La relevancia del tema es pues patente. Se echa de menos una reflexión profunda sobre el empleo de estos medios/medidas. Indudablemente el abordaje del tema necesariamente ha de ser multidisciplinar para alcanzar perspectivas que coadyuven a una mejor práctica psiquiátrica.
En definitiva, la reflexión ética sobre su uso, el marco normativo de su empleo, la incidencia de estos medios/medidas sobre la calidad asistencial, . . . devienen inevitables. La conjugación de estas distintas "miradas" es seguro que proporcionará al profesional de la salud mental un material enriquecedor para su práctica clínica. Naturalmente, una mesa de estas características ha de abordar no solo los aspectos teóricos (descriptivos y especulativos) sino que ha de aceptar el reto de aportar criterios, principios e instrumentos que sirvan para una mejor práctica clínica.