El trastorno esquizofreniforme, a pesar de muchos puntos en común con el trastorno esquizofrénico, tiene una serie de características diferenciales; véase el tiempo de evolución, su prevalencia hasta 5 veces más baja o su baja disfunción sociolaboral. Se presenta el caso de un varón de 27 años, presidiario, que acude a urgencias por agitación psicomotriz y clínica psicótica, con ideas delirantes de control hacia su persona, no persecutorias. Se descarta clínica afectiva mayor y trastorno por consumo de tóxicos, así como otras enfermedades concomitantes.
Durante su estancia en el hospital, continúa con su delirio confabulativo, el cual peca de cierta grandiosidad, no existiendo otra clínica psiquiátrica adyacente de ansiedad, agitación o conducta. El cuadro evoluciona invariablemente durante semanas, y se deja a la espera de un diagnóstico en función de la variable 'tiempo de evolución'.
Pilar Chacón Martínez, r1 del servicio de psiquiatría del Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca; Santiago Pina Franco, r2 del servicio de psiquiatría del Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca;María
TRASTORNO esquizofreniforme, A PROPÓSITO DE UN CASO
Javier Sánchez Sánchez, Pilar Chacón Martínez, Santiago Pina Franco, María Gavilán Morales,
Natividad Mejías Simarro, Cecilia Calero Mora, Manuel Martínez-Carlón Bueso, Miriam Fueyo
Estévez, Luna Fuentes Rumí, María José Martínez Mirete
hospital Universitario Virgen de la Arrixaca
jssdejuan@gmail. com
RESUMEN
El trastorno esquizofreniforme, a pesar de muchos puntos en común con el trastorno
esquizofrénico, tiene una serie de características diferenciales; véase el tiempo de evolución, su
prevalencia hasta 5 veces más baja o su baja disfunción sociolaboral. Se presenta el caso de un
varón de 27 años, presidiario, que acude a urgencias por agitación psicomotriz y clínica psicótica,
con ideas delirantes de control hacia su persona, no persecutorias. Se descarta clínica afectiva
mayor y trastorno por consumo de tóxicos, así como otras enfermedades concomitantes.
Durante su estancia en el hospital, continúa con su delirio confabulativo, el cual peca de cierta
grandiosidad, no existiendo otra clínica psiquiátrica adyacente de ansiedad, agitación o conducta.
El cuadro evoluciona invariablemente durante semanas, y se deja a la espera de un diagnóstico
en función de la variable 'tiempo de evolución''.
INTRODUCCIÓN
El término "psicosis esquizofreniforme" lo introdujo por primera vez el psiquiatra noruego Gabriel
Langfeldt, en el año 1937, para referirse a un grupo de pacientes con un trastorno psicótico
parecido a la esquizofrenia pero con mejor pronóstico que ésta, mejor adaptación premórbida y
un inicio más agudo y relacionado con episodios traumáticos.
El diagnóstico trastorno esquizofreniforme (TE) se incorpora oficialmente en las clasificaciones
diagnósticas internacionales en 1980.
Se diferenciaba de la esquizofrenia porque para su diagnóstico se exigía una duración inferior a
6 meses. En el DSM-III-R3 se introduce el calificativo "provisional; se definen también 4
características de buen pronóstico. El cumplimiento de un mínimo de 2 de estas características
permite definir al TE como "con características de buen pronóstico", lo cual anticiparía una
evolución favorable del trastorno. En el DSM-IV4 se acota la duración temporal del TE entre 1 y
6 meses para distinguirlo del trastorno psicótico breve. El DSM-IV-TR5 mantiene el diagnóstico
y no presenta modificaciones respecto a la edición anterior. En realidad, esta definición dista
mucho de la inicial de Langfeldt, que consideraba el TE una enfermedad cualitativamente distinta
de la esquizofrenia.
CASO CLÍNICO
Presentamos el caso de un paciente de 27 años remitido desde prisión a Urgencias por cuadro
de agitación psíquica. Ésta consiste en insomnio nocturno persistente, a la par que gritos
incontrolables.
Cuando se le entrevista, el paciente se encuentra consciente y orientado. De actitud colaboradora
y perfectamente abordable, abierto a mantener una discusión. Su discurso es fluido y no es del
todo incoherente, mezclando pensamientos. Manifiesta ideas delirantes de control por parte de
terceras personas, sugiriendo que `'su compañero de celda le controla a través del mando a
distancia''
No presenta otra clínica psiquiátrica asociada; no presenta alteraciones de la sensopercepción.
Tampoco presenta ideas auto ni heterolíticas.
El paciente tiene nula conciencia de enfermedad al inicio del cuadro, y como veremos más
adelante, ésta permanecerá inalterable.
Se le puede tachar de interpretativo, desconfiado, con un coeficiente intelectual bajo.
Durante su estancia en el hospital permanece invariable el delirio confabulativo de cierta
grandiosidad, es más, va en aumento según pasan los días y lo vive de manera más apasionada.
Cuando es preguntado por un tema, él se apresura a responder con información poco veraz, que
se reproduce a continuación:
"Tengo más de 10 mujeres", "Conozco al coronel de la Guardia Civil", "La mujer de Cristiano
Ronaldo quiere ser mi novia, y va a venir a verme porque me he hecho famoso".
Según refiere su familia, este cuadro tiene una evolución de 4 meses, sin antecedentes previos
personales. Tampoco se encuentra dentro de sus antecedentes personales cuadros de clínica
afectiva mayor, cuadros maníacos o de características mixtas.
Se le da el alta y debe continuar ingresado en enfermería para continuar observación, a expensas
de un posible cambio en su diagnóstico en función de la variable tiempo de evolución.
Además, es importante señalar que, aunque en un principio se pensó en ello, el consumo de
tóxicos era negativo.
DISCUSIÓN
El debate que aquí se genera viene dado por la escasa diferencia, separada por matices y ciertas
variables de los trastornos psicóticos.
En primer lugar, hemos de identificar cuáles son los posibles diagnósticos diferenciales, que se
encuadran dentro de los trastornos psicóticos.
Las principales características del trastorno esquizofreniforme son las siguientes:
Se cumplen estos 3 Criterios Diagnósticos.
Síntomas característicos: Dos (o más) de los siguientes, cada uno de ellos presente
durante una parte significativa de un período de 1 mes (o menos si ha sido tratado con éxito):
Ideas delirantes, alucinaciones, lenguaje, comportamiento catatónico
o gravemente desorganizado, síntomas negativos.
Exclusión de los trastornos esquizoafectivo y del estado de ánimo: El trastorno
esquizoafectivo y el trastorno del estado de ánimo con síntomas psicóticos se han descartado
debido a: 1) no ha habido ningún episodio depresivo mayor, maníaco o mixto concurrente
con los síntomas de la fase activa; o 2) si los episodios de alteración anímica han aparecido
durante los síntomas de la fase activa, su duración total ha sido breve en relación con la
duración de los períodos activo y residual.
Exclusión de consumo de sustancias y de enfermedad médica: El trastorno no es debido a
los efectos fisiológicos directos de alguna sustancia (p. ej. , una droga de abuso, un
medicamento) o de una enfermedad médica.
Como establecíamos en la introducción, el diagnóstico queda abierto, a expensas de la variable
tiempo; esto quiere decir que un episodio del trastorno (incluidas las fases prodrómica, activa y
residual) dura al menos 1 mes, pero menos de 6 meses.
Además, existen otras características que van a establecer la buena evolución clínica del
paciente; Éstas son:
1. Inicio de síntomas psicóticos acusados dentro de las primeras 4 semanas del primer cambio
importante en el comportamiento o en la actividad habitual
2. confusión o perplejidad a lo largo del episodio psicótico
3. buena actividad social y laboral premórbida
4. ausencia de aplanamiento o embotamiento afectivos
De éstas, han de cumplirse al menos dos para poder establecer un diagnóstico de trastorno
esquizofreniforme con buen pronóstico.
Por lo tanto establecemos las siguientes diferencias con el resto de trastornos:
El hecho fundamental que diferencia con la esquizofrenia es el tiempo de evolución, pues en el
trastorno esquizofreniforme, los síntomas están presentes menos de 6 meses. Además, no existe
disfunción sociolaboral, sí existente en el trastorno esquizofrénico.
Uno de los criterios diagnósticos es la no existencia de clínica afectiva mayor, ni manía, ni
episodios mixtos, por lo tanto, tendríamos aquí la clave para establecer el diagnóstico diferencial
con el trastorno esquizoafectivo.
Por último, pero no menos importante, es necesario descartar el consumo de tóxicos, hecho que,
de ser positivo, podría ser compatible con un cuadro psicótico inducido por tóxicos.
CONCLUSIÓN
El diagnóstico de trastorno esquizofreniforme es algo poco común, y mucho menos como en este
caso aquí presentado, el cual hemos visto desde los albores de su presentación.
En general, este diagnóstico depende en su gran mayoría del tiempo de evolución del cuadro.
Por ello, es preciso indicar que tras el seguimiento de estos pacientes, el 60% de ellos pasa a
considerarse un trastorno esquizofrénico, mientras que solamente el 25, 9 % continúa con el
diagnóstico primario a los 5 años de revisión, en términos generales.
Con respecto al trastorno esquizofreniforme, es preciso hacer una puntualización; las
características de buen pronóstico establecen una mejor evolución a lo largo de varios años de
estudio.
BIBLIOGRAFÍA
1. Langfeldt G. Definition of
2. American Psychiatric Association. Diagnostic and statistical manual of mental disorders. 4th
ed. Text Revised. Washington, DC: American Psychiatric Press; 2000.
3. Strakowski SM. Diagnostic validity of schizophreniform disorder. Am J Psychiatry.
1994; 151:815-24.
4. Benazzi F. DSM-III-R schizophreniform disorder with good prognostic features: a six-year
follow-up. Can J Psychiatry. 1998; 43:180-2.
1. Medline
5. trastorno esquizofreniforme. Estudio prospectivo de 5 años de seguimiento, Elsevier
publicaciones, R Pérez-Egea a, MJ Escartí a, JA Ramos-Quiroga a, I Corripio-Collado a, J
Pérez-Blanco a, V Pérez-Sola a, E Álvarez-Martínez a
6. Benazzi F. Family history of DSM-III-R schizophreniform disorder with good prognostic
features. Can J Psychiatry. 1998; 43:525-6.
7. American Psychiatric Association. DSM-V-TR, Breviario: Criterios Diagnósticos. Barcelona:
Masson, 2014
8. INTRODUCCIÓN A LA PSICOPATOLOGÍA Y LA PSIQUIATRÍA, 8ª ED. J. VALLEJO RUILOBA ,
MASSON, 2015
17º Congreso Virtual de Psiquiatria. com. Interpsiquis
2016 interpsiquis. com - Febrero 2016
Psiquiatria. com
IMPORTANTE: Algunos textos de esta ficha pueden haber sido generados partir de PDf original, puede sufrir variaciones de maquetación/interlineado, y omitir imágenes/tablas.