La intervención temprana en la psicosis (EIP) se ha desarrollado como un enfoque para mejorar el pronóstico de las personas con trastornos psicóticos y se ha afirmado que es un modelo de atención más eficiente. Sin embargo, la evidencia no es definitiva y las dudas se han extendido con respecto a los resultados económicos de los servicios de EIP en medio d...
La intervención temprana en la psicosis (EIP) se ha desarrollado como un enfoque para mejorar el pronóstico de las personas con trastornos psicóticos y se ha afirmado que es un modelo de atención más eficiente. Sin embargo, la evidencia no es definitiva y las dudas se han extendido con respecto a los resultados económicos de los servicios de EIP en medio del presupuesto de salud mental generalmente restringido.
El objetivo fue revisar la evidencia de costo-efectividad de los servicios EIP en todo el mundo.
Revisamos sistemáticamente la literatura económica sobre EIP siguiendo los Artículos de Reporte Preferidos para revisiones sistemáticas y las pautas de la declaración de Meta-Análisis. Los estudios se seleccionaron de acuerdo con los criterios establecidos anteriormente y se analizaron con herramientas estandarizadas de evaluación crítica para evaluaciones económicas basadas en ensayos y estudios de modelos.
Un total de 16 estudios fueron seleccionados después de aplicar los criterios de elegibilidad. La mayoría de ellos fueron evaluaciones económicas junto con ensayos clínicos.
La evidencia general fue consistente en la rentabilidad del EIP en comparación con la atención estándar para el primer episodio de psicosis y el paradigma de alto riesgo clínico de psicosis. Dicha evidencia se replicó en diferentes sistemas de salud, pero principalmente en países de altos ingresos. Sin embargo, la calidad metodológica de dicha evidencia fue moderada y la heterogeneidad fue significativa en todos los estudios.
Existe evidencia consistente de que la implementación de los servicios EIP podría ser una alternativa rentable en diferentes sistemas de salud. Sin embargo, dicha evidencia se deriva de estudios heterogéneos y en ocasiones metodológicamente defectuosos, lo que reduce la certeza de tal afirmación.
Se deben hacer más esfuerzos para evaluar rigurosamente el valor de esta intervención, antes de expandirla entre sistemas donde los presupuestos de salud mental están más limitados.
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