Autor/autores:
Claire J. McKinnon, Adam T. Eggebrecht , Alexandre Todorov...(et.al)
Los comportamientos restringidos y repetitivos (RRB, por sus siglas en inglés), detectables a los 12 meses en muchos bebés en los que se diagnostica un trastorno del espectro autista (TEA), pueden representar algunos de los marcadores de comportamiento más tempranos del TEA. Sin embargo, la función cerebral que subyace a la aparición de estos comportamientos clav...
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Los comportamientos restringidos y repetitivos (RRB, por sus siglas en inglés), detectables a los 12 meses en muchos bebés en los que se diagnostica un trastorno del espectro autista (TEA), pueden representar algunos de los marcadores de comportamiento más tempranos del TEA. Sin embargo, la función cerebral que subyace a la aparición de estos comportamientos clave sigue siendo desconocida.
Los datos de resonancia magnética de la conectividad funcional (fc) del comportamiento y del estado de reposo se obtuvieron de 167 niños con alto y bajo riesgo familiar de TEA a los 12 y 24 meses (n = 38 en ambos puntos temporales). Veinte bebés cumplieron con los criterios de TEA a los 24 meses.
Dividimos los RRB en cuatro subcategorías (restringido, estereotipado, ritualista / similar, auto agresivo) y utilizamos un enfoque basado en datos para identificar redes cerebrales funcionales asociadas con el desarrollo de cada subcategoría RRB.
Las puntuaciones más altas para el comportamiento ritualista / similar se asociaron con un Fc menos positivo entre las redes visuales y de control a los 12 y 24 meses.
Los comportamientos rituales / similares y estereotipados se asociaron con menos fc positivo entre las redes de modo visual y por defecto a los 12 meses. A los 24 meses, los comportamientos estereotipados y restringidos se asociaron con un fc más positivo entre el modo predeterminado y las redes de control.
Además, a los 24 meses, el comportamiento estereotipado se asoció con un fc más positivo entre la atención dorsal y las redes subcorticales, mientras que el comportamiento restringido se asoció con un fc más positivo entre el modo predeterminado y las redes de atención dorsal. No se observaron asociaciones significativas a nivel de red para el comportamiento auto agresivo.
Estas observaciones marcan la primera descripción conocida de los sistemas cerebrales funcionales subyacentes de las RRB, refuerzan la validez de construcción de las subcategorías de la RRB en lactantes e implican sustratos neuronales específicos para futuras intervenciones dirigidas a las RRB.
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