¿Que es la depresión?

RESUMEN

Las personas pueden sentirse “bien”,  sentir que son capaces, con ánimo, con energía y con control. En determinados periodos pueden sentirse “mal”, incapaces de realizar actividades que previamente realizaban sin dificultad, desanimados, desmotivados, sin energía y sin control sobre su voluntad. En el segundo caso podríamos estar ante una depresión. 

Las oscilaciones del estado de ánimo de poca intensidad son normales a lo largo del día y así nos alegramos ante pequeños detalles ( un amanecer, un detalle de una persona querida, etc.) o nos entristecemos igualmente ante pequeños contratiempos como alguien que no para en un paso cebra, o una discusión con un compañero durante el café. Estas oscilaciones son normales. Hemos de saber que la tristeza es normal en determinadas situaciones y que a veces el no sentirla es lo que debe de preocuparnos ( por ejemplo ante una pérdida, el fallecimiento de un ser querido, etc.).

En ocasiones las oscilaciones del estado de ánimo son mucho más intensas y no duran sólo minutos, sino que duran semanas o meses, en estos casos podríamos estar hablando de “manía” cuando el estado de ánimo es elevado, presentando el paciente muchas ideas de forma simultánea, se desinhibe, puede estar provocativo o exhibicionista, muy activo, no precisa dormir, come en exceso, gasta sin miramientos, etc....

En otras ocasiones el ánimo está disminuido de forma intensa y durante semanas de duración, es entonces cuando hablamos de depresión. Es un término que se ha difundido notablemente en la actualidad, utilizándose de forma frecuente en la calle para denominar estados de ánimo, situaciones, etc. 

Se entiende por depresión un trastorno del estado de ánimo en el cual éste se desplaza hacia la tristeza notando la persona una notable disminución de energía, actividad, e interés en la mayoría de actividades de la vida diaria que la limitan para desarrollar estas como lo hacía hasta ese momento, acompañado de un notable pesimismo que no se corresponde con el carácter habitual del paciente. Estos cambios originan un deterioro del funcionamiento interpersonal, perdiendo interés en los que le rodean,  también pierde interés en su trabajo, puede dejar de ir a trabajar y supone en ocasiones la pérdida del puesto de trabajo, puede perder hábitos de higiene y alimentación que previamente hacía sin ningún esfuerzo y dejar de lado sus hobbies y actividades placenteras que tanto le gustaban hasta ese momento, puede acompañarse de síntomas físicos ( disminución de peso o aumento, sudoración, etc.)

Se han utilizado diferentes nombres para denominar este trastorno a lo largo de la historia desde la antigüedad, así el término griego "distimia" significaba originalmente "malhumorado" y se remonta a la descripción que hace Hipócrates del temperamento melancólico. La primera descripción clínica corresponde a Kahlbaum (1863), que la definió como una forma crónica de melancolía en oposición a la "ciclotimia", un trastorno caracterizado por la fluctuación del estado de ánimo (estados de euforia alternando con otros de tristeza).

Esta enfermedad, es como cualquier otra (asma, infección bacteriana o hepatitis), está constituida por  varios síntomas, tiene una serie de causas y un desarrollo más o menos conocido y tiene un tratamiento que, en la mayoría de los casos, es eficaz.

A lo largo de la vida hasta 1 de cada 4 personas puede llegar a presentar un trastorno del estado de ánimo, dándose por igual en todas las culturas y siendo más frecuente en mujeres que en hombres.  La depresión es una de las condiciones de salud mental que más se diagnostica dentro de la población general, calculándose que 1 de cada 20 personas se deprime cada año, siendo necesario hospitalizar a 1 de cada 15 deprimidos. Y es importante realizar el diagnóstico de depresión debido a que el 15% de los pacientes con depresión severa intentarán suicidarse. A pesar de lo que algunos creen, nadie está libre de caer en una depresión, pudiendo ésta afectar a cualquier persona ante determinadas circunstancias y ante determinados acontecimientos, en ocasiones, sin que suceda nada en el ambiente de esta persona y sin tener ningún “problema”. Las personas entienden esto fácilmente para una hepatitis o una neumonía, sin embargo, con la depresión muchas personas se consideran erróneamente inmunes.

En resumen la depresión es un trastorno afectivo del estado de ánimo que incapacita al que la sufre para disfrutar de las cosas que antes disfrutaba .