Autor/autores:
Emeline Mullier, Timo Roine, Alessandra Griffa...(et.al)
Cada vez hay más pruebas de que la desregulación redox, que puede conducir al estrés oxidativo y, finalmente, al deterioro de los oligodendrocitos y las interneuronas de parvalbúmina, puede ser la base de las alteraciones de la conectividad cerebral en la esquizofrenia. En consecuencia, informamos previamente que los niveles de glutatión antioxidante cerebral en...
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Cada vez hay más pruebas de que la desregulación redox, que puede conducir al estrés oxidativo y, finalmente, al deterioro de los oligodendrocitos y las interneuronas de parvalbúmina, puede ser la base de las alteraciones de la conectividad cerebral en la esquizofrenia.
En consecuencia, informamos previamente que los niveles de glutatión antioxidante cerebral en la corteza prefrontal medial se correlacionaron positivamente con una mayor conectividad funcional a lo largo del haz de cíngulo en controles sanos, pero no en pacientes con psicosis temprana. En un reciente ensayo controlado aleatorio, observamos que la suplementación de 6 meses con un precursor de glutatión, N-acetil-cisteína, aumentó los niveles de glutatión cerebral y mejoró la expresión sintomática y la velocidad de procesamiento.
Investigamos el efecto de la suplementación con N-acetil-cisteína en la conectividad funcional entre regiones de la corteza cingulada, que se han relacionado con síntomas positivos y disminución de la velocidad de procesamiento. En este estudio piloto, comparamos la conectividad estructural y la conectividad funcional en estado de reposo entre los pacientes con psicosis temprana tratados con N-acetil-cisteína (n = 9) o placebo (n = 11) de 6 meses con una salud saludable de sexo y edad. sujetos de control (n = 74).
Observamos que la suplementación con N-acetil-cisteína a los 6 meses aumenta la conectividad funcional a lo largo del cíngulo y más precisamente entre la parte anterior caudal y el istmo de la corteza cingulada. Estos cambios funcionales pueden explicarse parcialmente por un aumento de la centralidad de estas regiones en la red funcional del cerebro.
La suplementación con N-acetil-cisteína tiene un efecto positivo en la conectividad funcional dentro de la corteza cingulada en pacientes con psicosis temprana. Hasta donde sabemos, este es el primer estudio que sugiere que el aumento de los niveles de glutatión cerebral a través de la suplementación con N-acetil-cisteína puede mejorar la conectividad funcional del cerebro.
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