La aplicación de la dimensión afectiva de la psicopatía a los jóvenes tiene una comprensión avanzada de los problemas de conducta en los jóvenes, lo que lleva a sugerir que otros aspectos de la psicopatía pueden hacer lo mismo. Esto se abordó en el presente estudio examinando la estructura y la validez de los rasgos psicopáticos en ni&...
La aplicación de la dimensión afectiva de la psicopatía a los jóvenes tiene una comprensión avanzada de los problemas de conducta en los jóvenes, lo que lleva a sugerir que otros aspectos de la psicopatía pueden hacer lo mismo. Esto se abordó en el presente estudio examinando la estructura y la validez de los rasgos psicopáticos en niños de edad primaria según la calificación de madres y maestros en la escala de psicopatía Infantil - Revisada (CPS-R).
Los participantes fueron 222 niños (80, 2% hombres; mago = 8, 92), la mayoría (71, 6%) de los cuales cumplieron los criterios tanto para el TDAH como para los problemas de conducta. El análisis factorial confirmatorio apoyó un modelo de cuatro factores que consiste en factores prosociales-empáticos (PE), grandiosos-manipuladores (GM), emocionalmente volátiles (EV) y atentos-planificados (AP). El CPS-R demostró una buena validez de criterio con medidas bien establecidas de problemas de conducta infantil e insensibilidad. Los factores EV y AP demuestran validez incremental al moderar la relación entre problemas de conducta y deterioro.
Los perfiles latentes respaldaron una solución de tres perfiles para madres y una solución de cuatro perfiles para maestros, con perfiles que constaban de un grupo bajo, un grupo moderado y uno alto en todas las medidas para ambos informantes, y un cuarto grupo que era alto en todos medidas excepto CD y PE limitada. Los perfiles diferían significativamente entre sí en la insensibilidad y el deterioro, siendo la PE limitada el mejor diferenciador de los jóvenes con mayor comportamiento antisocial según el informe de la madre y el maestro.
Los resultados sugieren que las madres y los maestros pueden identificar a los niños en riesgo de una trayectoria más antisocial de comportamiento, que vale la pena examinar múltiples dimensiones de la psicopatía (en lugar de solo la dimensión afectiva), y que el CPS-R puede ser útil para detectar a los jóvenes que tienen más probabilidades de mostrar un comportamiento antisocial y una discapacidad más graves.
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