Los Centros para el Control y la prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos están investigando un grupo de enfermedades pulmonares que, según han afirmado, podrían estar relacionadas con el uso del cigarrillo electrónico.
Después de detectar varios casos en 14 estados diferentes, los CDC han aclarado que no hay evidencia de que exista una enfermedad infecciosa detrás de estas afecciones y han insistido en que necesitan más información para determinar si en realidad están causadas por el uso del cigarrillo electrónico o no. En estos momentos, los CDC están trabajando con los departamentos de salud de Wisconsin, Illinois, California, Indiana y Minnesota.
Desde el 28 de junio, se han registrado 94 posibles casos de enfermedades pulmonares graves relacionadas con la inhalación de vapores, siendo los principales afectados adolescentes y adultos jóvenes. De estos casos, 30 ocurrieron en Wisconsin. Los principales síntomas que han experimentado los pacientes son tos, falta de aliento y fatiga.
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Así, otros estados, como Nueva York y Nueva Jersey, han emitido advertencias de salud con respecto a las enfermedades pulmonares relacionadas con el vapor. Por el momento, los CDC no han relacionado este tipo de dolencias con ningún producto específico. En Estados Unidos, la compañía Juul Labs es el principal fabricante de cigarrillos electrónicos.
"Al igual que cualquier evento relacionado con la salud supuestamente asociado con el uso de productos de vapor, estamos monitoreando estos documentos", ha señalado la compañía.
"Estos informes reafirman la necesidad de mantener todos los productos de tabaco y nicotina fuera del alcance de los jóvenes, mediante una regulación del acceso. También debemos asegurarnos de que los productos ilegales, como los falsificados, permanezcan fuera del mercado y alejados de la juventud", han añadido.
Además han aclarado que, según estos informes, varias de las enfermedades relacionadas con la inhalación han dado positivo en THC, "una sustancia que se encuentra en la marihuana y que no vendemos".
La Organización Mundial de la Salud ha informado de que aunque generalmente se crea que los cigarrillos electrónicos son más seguros que los cigarrillos tradicionales, que acaban con la vida de muchos de sus usuarios, los efectos a largo plazo siguen siendo desconocidos.
