Autor/autores:
Michael E. Thase, Maryland
En este número, Rhee y sus colegas se basan en datos recopilados como parte de las Encuestas Nacionales de atención Médica Ambulatoria (NAMCS) para proporcionar una descripción actualizada y representativa a nivel nacional de las tendencias recientes en la farmacoterapia del trastorno bipolar. Los datos de la encuesta NAMCS, que se extienden desde 1997 hasta 201...
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En este número, Rhee y sus colegas se basan en datos recopilados como parte de las Encuestas Nacionales de atención Médica Ambulatoria (NAMCS) para proporcionar una descripción actualizada y representativa a nivel nacional de las tendencias recientes en la farmacoterapia del trastorno bipolar.
Los datos de la encuesta NAMCS, que se extienden desde 1997 hasta 2016 y se agrupan en cinco épocas de 4 años, documentan varios cambios notables en la atención ambulatoria brindada por los psiquiatras en los Estados Unidos, incluidas las tendencias en los medicamentos que recetan.
Estos datos son importantes por varias razones. La condición que Kraepelin llamó "locura maníaco-depresiva" a finales del siglo XIX sigue siendo una de las diversas formas clásicas de enfermedad psiquiátrica grave que han contribuido a definir la práctica psiquiátrica moderna.
A medida que se acerca el centenario de la publicación de la edición final del texto de Kraepelin, las condiciones ahora agrupadas como trastornos bipolares siguen siendo uno de los problemas de salud pública más importantes del mundo porque la enfermedad a menudo comienza en la adolescencia o la edad adulta; se caracteriza por recurrencias episódicas y, no pocas veces, sigue un ciclo crónico o rápido; está asociado con altas tasas de discapacidad y discapacidad vocacional; y resulta en una reducción significativa de la esperanza de vida, tanto por un mayor riesgo de suicidio como por las comorbilidades cardiometabólicas.
El tratamiento eficaz puede mitigar el impacto del trastorno bipolar en la salud pública, y en los Estados Unidos se dispone de medicamentos antimaníacos eficaces desde hace 60 años.
El 2020 marca el 50 aniversario de la aprobación de la Administración de drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) de las primeras sales de litio para la terapia profiláctica del trastorno bipolar.
Los psiquiatras continúan prescribiendo la mayoría de los medicamentos que reciben las personas con trastorno bipolar, y el uso hábil de la gama completa de tratamientos representa el mejor medio para reducir el impacto deletéreo que esta enfermedad tiene en la salud mental y física y la calidad de vida del paciente, como así como los efectos que tiene en el funcionamiento familiar, social y vocacional.
A pesar de varios avances en la farmacoterapia del trastorno bipolar, todavía existe una gran necesidad insatisfecha de tratamientos más eficaces o mejor tolerados. Encontrar el régimen de tratamiento adecuado para los pacientes que no responden a las terapias estándar es uno de los mayores desafíos que enfrentan los psiquiatras en la práctica contemporánea.
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