El funcionamiento neurocognitivo es un biomarcador potencial para avanzar en la detección, el pronóstico y la atención preventiva de las personas con alto riesgo clínico de psicosis (CHR-P). La consistencia actual y la magnitud del funcionamiento neurocognitivo en los individuos en CHR-P son indeterminadas.
El objetivo de este estudio es proporcionar una síntesi...
El funcionamiento neurocognitivo es un biomarcador potencial para avanzar en la detección, el pronóstico y la atención preventiva de las personas con alto riesgo clínico de psicosis (CHR-P). La consistencia actual y la magnitud del funcionamiento neurocognitivo en los individuos en CHR-P son indeterminadas.
El objetivo de este estudio es proporcionar una síntesis actualizada de evidencia sobre la consistencia y magnitud del funcionamiento neurocognitivo en individuos en CHR-P.
Investigadores independientes extrajeron los datos, agrupando las tareas neurocognitivas de acuerdo con 7 dominios de investigación de medición y tratamiento para mejorar la cognición en la esquizofrenia (MATRICS) y 8 dominios de CHR-P. Se realizaron metanálisis de modelos de efectos aleatorios, evaluación de los sesgos de publicación y calidad de los estudios, y metarregresiones.
La principal medida del tamaño del efecto fue la cobertura g de funcionamiento neurocognitivo en individuos en CHR-P (1) en comparación con individuos de control sanos (HC) o (2) en comparación con individuos con psicosis de primer episodio (FEP) o (3 ) estratificado para la transición longitudinal a la psicosis.
Se incluyeron un total de 78 estudios independientes, que consistieron en 5162 individuos en CHR-P (edad media [DE; rango], 20, 2 [3, 3; 12, 0-29, 0] años; 2529 [49, 0%] eran mujeres), 2865 individuos HC ( edad media [DE; rango], 21, 1 [3, 6; 12, 6-29, 2] años; 1490 [52, 0%] eran mujeres) y 486 personas con PEP (edad media [DE; rango], 23, 0 [2, 0; 19, 1-26, 4] años 267 [55, 9%] eran mujeres). En comparación con los individuos con HC, los individuos en CHR-P mostraron déficits de medianos a grandes en la tarea de lectura de palabras en color de Stroop ( g = −1, 17; IC del 95%, −1, 86 a −0, 48), Prueba de aprendizaje verbal de Hopkins: revisada ( g = −0, 86 ; IC del 95%, −1, 43 a −0, 28), prueba de codificación de símbolos de dígitos ( g = −0, 74; IC del 95%, −1, 19 a −0, 29), Evaluación breve de la codificación de símbolos de la escala cognitiva ( g = −0, 67; IC del 95%, −0, 95 a −0, 39), Prueba de identificación del olfato de la Universidad de Pennsylvania ( g = −0, 55; IC del 95%, −0, 97 a −0, 12), Tarea de insinuación ( g = −0, 53; IC del 95%, −0, 77 a - 0, 28), Prueba de aprendizaje verbal auditivo de Rey ( g = −0, 50; IC del 95%, −0, 78 a −0, 21), Prueba de aprendizaje verbal de California (CVLT) ( g = −0, 50; IC del 95%, −0, 64 a −0, 36), y Prueba nacional de lectura para adultos ( g = −0, 52; IC del 95%, −1, 01 a −0, 03). Los individuos en CHR-P estaban menos deteriorados que los individuos con FEP. La transición longitudinal a la psicosis desde un estado CHR-P se asoció con déficits medianos a grandes en la tarea CVLT ( g = −0, 58; IC del 95%, −1, 12 a −0, 05). Las metarregresiones encontraron efectos significativos de la edad y la educación en la velocidad de procesamiento.
Las conclusiones y los hallazgos de relevancia de este metanálisis apoyan la disfunción neurocognitiva como un biomarcador potencial de detección y pronóstico en individuos en CHR-P. Estos hallazgos pueden hacer avanzar la investigación clínica e informar los enfoques preventivos.
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