Los medicamentos se consideran seguros en general, pero el efecto de los antidepresivos en el feto sigue siendo un tema de cierta preocupación. Ahora, investigadores del Kaiser Permanente Northern en California (EEUU) han descubierto que son las condiciones psiquiátricas maternas, y no el uso de inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (isrs), los que aumentan el riesgo de trastorno del espectro autista (TEA) y retraso del desarrollo (DD) en la descendencia.
El estudio, que aparece en 'Biological Psychiatry', viene a aclarar dudas antes estudios anteriores que señalan vínculos entre el uso de ISRS y el TEA en la descendencia, y que el TEA está asociado con vías serotoninérgicas interrumpidas. Esta nueva investigación debería proporcionar algo de tranquilidad para el 6 por ciento estimado de mujeres embarazadas en los EEUU que toman estos fármacos
"Nuestros últimos hallazgos son una buena noticia para las mujeres que manejan afecciones psiquiátricas como la depresión y la ansiedad durante el embarazo y son consistentes con un creciente cuerpo de investigación que está tratando de mejorar desenmarañar las relaciones separadas del tratamiento con ISRS de la madre y las indicaciones psiquiátricas durante el embarazo con el desarrollo neurológico del niño", señala Jennifer Ames, autora principal del estudio.
Ames y sus colegas utilizaron datos del Estudio para explorar el desarrollo temprano (SEED), que recopiló información sobre el desarrollo de miles de niños nacidos en los EEUU. Entre 2003 y 2011. El análisis actual de los datos de SEED incluyó tres grupos de niños: con TEA (1367 niños); con DD (1. 750 niños); o controles de población sana (1. 671 niños). Se determinó que las madres tenían trastornos psiquiátricos y que habían tomado ISRS durante el embarazo según el autoinforme y los registros médicos.
Aproximadamente un tercio de las madres en el estudio tenían una afección psiquiátrica antes o durante el embarazo, y aproximadamente un cuarto de ellas tomaban ISRS u otros antidepresivos. Los hallazgos indicaron que el riesgo de TEA o DD se duplicó aproximadamente en los hijos de madres con un trastorno psiquiátrico en comparación con los que no lo tenían. Pero lo que es más importante, el uso de ISRS no se asoció con un mayor riesgo.
"Los padres han estado preocupados por los riesgos que representan para los bebés cuando las madres toman medicamentos antidepresivos. Es un gran alivio ver que el consumo materno de antidepresivos no aumenta el riesgo de autismo, trastorno del espectro autista u otros trastornos del desarrollo neurológico. Sin embargo, este estudio sí confirma que los trastornos psiquiátricos maternos están asociados con un mayor riesgo de trastorno del espectro autista en la descendencia", John Krystal, editor de biological psychiatry.
"Nuestro estudio tiene algunas fortalezas únicas, como la inclusión de un grupo grande y demográficamente diverso de madres y niños en los Estados Unidos, un análisis de subgrupos específicos de niños con trastorno del espectro autista y otros trastornos del desarrollo, y un examen de múltiples tipos de afecciones psiquiátricas en las madre", concluye Ames.