Autor/autores:
Annie Bernier ,Camille Marqués-Brideau ,Carlota Dusablón...(et.al)
El temperamento infantil juega un papel clave en el desarrollo de la psicopatología, especialmente a través de las transacciones con el entorno familiar. En particular, la emocionalidad temperamental negativa es un antecedente documentado del comportamiento agresivo infantil, y en ocasiones se propone que el estrés de los padres juega un papel mediador en esta asociació...
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El temperamento infantil juega un papel clave en el desarrollo de la psicopatología, especialmente a través de las transacciones con el entorno familiar. En particular, la emocionalidad temperamental negativa es un antecedente documentado del comportamiento agresivo infantil, y en ocasiones se propone que el estrés de los padres juega un papel mediador en esta asociación. Sin embargo, la investigación ha abordado principalmente las asociaciones bivariadas y rara vez consideró la cadena completa que vincula la emocionalidad negativa del niño con la agresión a través del estrés de los padres.
Además, los estudios más relevantes se han centrado en las madres; por lo tanto, las posibles contribuciones combinadas del estrés materno y paterno, como los efectos interactivos, están poco investigadas.
Al abordar estas brechas, este estudio longitudinal de múltiples informantes tuvo como objetivo examinar el papel mediador del estrés de crianza materno, el estrés de crianza paterno, y su interacción en la asociación entre emocionalidad negativa infantil y agresión infantil.
Entre 186 familias de clase media, en su mayoría blancas (98 niños), las madres y los padres informaron sobre la emocionalidad negativa infantil a los 15 meses, ambos padres informaron sobre su propio estrés de crianza a los 3 años, y los maestros evaluaron la agresión infantil en el primer grado de escuela primaria.
Los resultados revelaron una vía mediada moderada, de modo que hubo un efecto indirecto significativo de la emocionalidad negativa del niño sobre la agresión a través del estrés paterno, sin embargo, solo cuando el estrés materno también fue alto.
Estos hallazgos sugieren que el riesgo de que la emocionalidad negativa se traduzca en un comportamiento agresivo aumenta cuando ambos padres experimentan altos niveles de estrés en su rol de padres.
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Jose Luis Frias Pulido
Médico - España
Fecha: 11/05/2022
