Autor/autores:
CORINNA PANCHERI , ANNALISA MARAONE , VALENTINA ROSELLI...(et.al)
Esta revisión narrativa aborda las interconexiones entre el estrés, los trastornos mentales y la migraña con un enfoque específico en las intervenciones no farmacológicas que pueden ser efectivas para mejorar tanto la migraña como la comorbilidad psiquiátrica. La migraña a menudo es comórbida con depresión, ansiedad, tra...
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Esta revisión narrativa aborda las interconexiones entre el estrés, los trastornos mentales y la migraña con un enfoque específico en las intervenciones no farmacológicas que pueden ser efectivas para mejorar tanto la migraña como la comorbilidad psiquiátrica.
La migraña a menudo es comórbida con depresión, ansiedad, trastornos de la personalidad y trastornos del sueño. El estrés subjetivo y los factores estresantes son desencadenantes comunes de los ataques de migraña y son factores de riesgo de cronificación, mientras que los trastornos mentales y las respuestas al estrés están estrechamente vinculados en una relación bidireccional.
Estudios recientes muestran que la comorbilidad psiquiátrica se asocia con la gravedad de la migraña, peores resultados, aumento de la discapacidad y reducción de la calidad de vida. Se publicaron numerosos estudios sobre intervenciones no farmacológicas para la migraña y los tratamientos conductuales incluyeron biofeedback, terapia cognitivo-conductual, entrenamiento de relajación, manejo del estrés y psicoterapia psicodinámica breve.
En conjunto, las intervenciones psicológicas demostraron ser eficaces en el tratamiento de la migraña y una combinación de tratamiento farmacológico y psicológico parece ser más eficaz que la medicación o la psicoterapia por sí solas. La eficacia de las intervenciones no farmacológicas debería deberse a la mejora de la migraña, la vulnerabilidad relacionada con el estrés y los trastornos mentales en conjunto, y el tratamiento combinado podría prevenir el circuito de cronificación de la migraña.
Se necesitan estudios bien diseñados a largo plazo para aclarar la eficacia comparativa de las técnicas no farmacológicas en el tratamiento y la prevención de la migraña. Las intervenciones psicológicas demostraron ser eficaces en el tratamiento de la migraña y una combinación de tratamiento farmacológico y psicológico parece ser más eficaz que la medicación o la psicoterapia solas.
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