La regresión del lenguaje, definida ampliamente como la pérdida de las habilidades lingüísticas adquiridas en la primera infancia, es una característica distintiva del autismo. Poco se sabe sobre los factores subyacentes a la regresión o el pronóstico de los niños que presentan regresión.
Examinamos los predictores potenciales de la reg...
La regresión del lenguaje, definida ampliamente como la pérdida de las habilidades lingüísticas adquiridas en la primera infancia, es una característica distintiva del autismo. Poco se sabe sobre los factores subyacentes a la regresión o el pronóstico de los niños que presentan regresión.
Examinamos los predictores potenciales de la regresión del lenguaje y probamos su asociación con el desarrollo del lenguaje en una muestra longitudinal prospectiva de niños con trastorno del espectro autista (TEA) desde el diagnóstico hasta los 10 años.
Métodos
Analizamos datos de Pathways in ASD, un estudio longitudinal prospectivo de 421 niños inscritos en el momento de un diagnóstico de autismo entre 2 y 5 años. La entrevista de diagnóstico de autismo: los datos revisados estaban disponibles para 408 niños, de los cuales 90 (22%) se clasificaron con regresión del lenguaje.
Resultados
Los factores demográficos y de salud, incluidos la educación del cuidador, los ingresos familiares, el sexo del niño, las convulsiones informadas y la edad de inscripción, no difirieron entre los niños con y sin regresión del lenguaje.
Los niños con regresión del lenguaje caminaron antes y obtuvieron las primeras palabras antes que aquellos sin regresión. Sin embargo, ambos grupos alcanzaron el habla de frases a edades comparables.
Aquellos con regresión exhibieron mayores retrasos en la comunicación expresiva y receptiva durante el período de seguimiento, aunque este efecto se atenuó cuando se tomaron en cuenta las diferencias iniciales en la capacidad motora y cognitiva.
En general, aquellos con regresión del lenguaje continuaron exhibiendo un retraso en la comunicación expresiva pero no receptiva en comparación con aquellos sin regresión. Las trayectorias de comunicación fueron heterogéneas a la edad de 10 años, independientemente del estado de regresión.
Conclusiones
Aunque la regresión del lenguaje puede ser alarmante, nuestros hallazgos confirman que su ocurrencia no presagia necesariamente peores resultados de desarrollo en relación con aquellos sin regresión.
Aunque puede persistir una discrepancia en las habilidades de comunicación equivalentes a la edad, se puede esperar que esto sea de menor importancia práctica con niveles promedio crecientes de habilidades.
Los estudios futuros deben tener en cuenta la variabilidad significativa en las trayectorias del lenguaje al considerar factores más allá de la regresión del desarrollo.
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