PUBLICIDAD

Me Gusta   0 0 Comentar  0 0
  DESCARGAR

Algunas aproximaciones en la investigación de la inteligencia y el pensamiento crítico en la vejez.

Fecha Publicación: 01/03/2009
Autor/autores: Silvina Monchietti Maccarone

RESUMEN

Presentamos las primeras aproximaciones de una investigación en curso sobre el funcionamiento cognitivo en el envejecimiento normal desde dos modelos teórico-empíricos: bidimensional de inteligencia fluida-cristalizada (Horn y Cattell, 1978) y pensamiento crítico (Facione, 2002). Teniendo en cuenta avances teórico-metodológicos que cuestionan el supuesto deterioro cognitivo universal e irreversible, se realiza una revisión teórica a la par de un trabajo de investigación en campo que intenta profundizar el conocimiento de las características del pensamiento en adultos mayores sin deterioro cognitivo.

Las investigaciones en este campo no son concluyentes; si bien coinciden en la afirmación de que este deterioro se produce, divergen los criterios respecto a las causas, la magnitud y alcances, y a cómo se da este proceso. Una de las posturas clásicas al respecto enfatiza el decremento de la inteligencia en los ancianos, aunque en las últimas décadas han surgido investigadores que desde perspectivas diferentes destacan aspectos en los que el rendimiento se mantiene por largo tiempo y otros en los que los ancianos pueden superar a los más jóvenes, como por ejemplo los niveles de mayor complejidad a los que puede arribar el pensamiento en este punto del curso de vida.


Palabras clave: Inteligencia, Pensamiento crítico, Vejez
Tipo de trabajo: Conferencia
Área temática: Neurocognitivos, Trastornos neurocognitivos .

Algunas aproximaciones en la investigación de la inteligencia y el pensamiento crítico en la vejez.

Maccarone, Silvina Monchietti.

Universidad Nacional de Mar del Plata. Facultad de psicología.

PALABRAS CLAVE: Vejez, inteligencia, pensamiento crítico.
[11/2/2009]


Resumen

Presentamos las primeras aproximaciones de una investigación en curso sobre el funcionamiento cognitivo en el envejecimiento normal desde dos modelos teórico-empíricos: bidimensional de inteligencia fluida-cristalizada (Horn y Cattell, 1978) y pensamiento crítico (Facione, 2002). Teniendo en cuenta avances teórico-metodológicos que cuestionan el supuesto deterioro cognitivo universal e irreversible, se realiza una revisión teórica a la par de un trabajo de investigación en campo que intenta profundizar el conocimiento de las características del pensamiento en adultos mayores sin deterioro cognitivo. Las investigaciones en este campo no son concluyentes; si bien coinciden en la afirmación de que este deterioro se produce, divergen los criterios respecto a las causas, la magnitud y alcances, y a cómo se da este proceso. Una de las posturas clásicas al respecto enfatiza el decremento de la inteligencia en los ancianos, aunque en las últimas décadas han surgido investigadores que desde perspectivas diferentes destacan aspectos en los que el rendimiento se mantiene por largo tiempo y otros en los que los ancianos pueden superar a los más jóvenes, como por ejemplo los niveles de mayor complejidad a los que puede arribar el pensamiento en este punto del curso de vida.

 



Introducción

Con este trabajo presentamos algunas discusiones teóricas que enmarcan un proyecto de investigación que se está realizando en el marco de Becas de Investigación para Estudiantes Avanzados de la Facultad de psicología, Universidad Nacional de Mar del Plata.  
El proyecto se orienta a caracterizar el funcionamiento cognitivo en el envejecimiento normal, desde dos modelos teórico-empíricos: bidimensional de inteligencia fluida y cristalizada (Horn y Cattell, 1978) y pensamiento crítico (Facione, 2002).
Teniendo en cuenta los avances teórico-metodológicos que cuestionan el supuesto deterioro cognitivo universal e irreversible en la vejez, se realiza un recorrido teórico a la par que un trabajo de investigación empírica que intenta arribar a una caracterización del pensamiento en adultos mayores sin deterioro cognitivo, así como a examinar las relaciones existentes entre inteligencia fluida y cristalizada y pensamiento crítico.
Se espera obtener conocimiento esclarecedor del funcionamiento cognitivo en la vejez, relacionar los datos con nuevas concepciones científicas y evidencia empírica, a fin de determinar potencialidades cognitivas de adultos mayores, tendiente a renovar representaciones sociales negativas de la cognición en la vejez.

 

 

Objetivos

Los objetivos que guían la investigación versan sobre la exploración y descripción del funcionamiento cognitivo en la vejez, la indagación y evaluación de la inteligencia fluida y cristalizada y sus posibles relaciones con el pensamiento crítico en adultos mayores.
Nos interesa presentar en este trabajo algunas de las discusiones que se han generado en torno a dichas temáticas y recorrer distintas líneas de estudio no sólo para conocer el desarrollo de las diferentes teorizaciones y su evolución en cuanto a las propuestas de abordaje, sino también para comprender la incidencia de dichos cambios en las concepciones propias del saber cotidiano acerca de las capacidades y competencias cognitivas en la vejez, y por esta vía, su aporte en la determinación del estatuto social del viejo.

 

 

Algunas propuestas teóricas

Las posturas clásicas al respecto tienden a enfatizar el decremento de la inteligencia en los ancianos, sosteniendo todavía una fuerte ligazón entre aspectos biológicos y psicológicos que implicarían una disminución o pérdida conjunta de capacidades y competencias. Sin embargo, en las últimas décadas han surgido investigadores que desde perspectivas diferentes destacan aspectos en los que el rendimiento se mantiene por largo tiempo y aún otros en los que los ancianos pueden superar a los más jóvenes, como por ejemplo los niveles de mayor complejidad a los que puede arribar el pensamiento en este punto del curso de vida. Los estudios sobre déficit cognitivo en la vejez generalmente utilizan comparaciones entre sujetos jóvenes y viejos, y en ellos se ratifica que los ancianos son menos aptos para organizar e integrar la información que los jóvenes y que es por ello que tienen menos éxito en las tareas de resolución de problemas. Pero estas diferencias en los resultados obtenidos en los tests de inteligencia están también ligadas a diversos factores externos, entre ellos la diferencia en el nivel de escolaridad entre las generaciones estudiadas.  
Así mismo se ha comprobado que, además de la edad, en el mantenimiento de las capacidades intelectuales interviene la motivación de persistir en el uso de las mismas. Es por ello que la estimulación ambiental suele tener un papel preponderante en este sentido.  
Además de los aspectos emocionales y afectivos (motivaciones, bienestar psicológico, etc. ) existen otros factores importantes que determinan el nivel de competencia cognitiva de las personas mayores: el nivel de salud, el nivel educativo y cultural, la experiencia profesional. En general, hay acuerdo con respecto a que la edad cronológica de por sí no determina de forma rígida el deterioro intelectual.
Por otra parte, el envejecimiento puede verse también como un proceso de adaptación a los cambios que implica. El desarrollo cognitivo en la vejez puede adoptar formas y direcciones distintas al de las etapas previas, principalmente gracias a la mayor experiencia y conocimiento que los sujetos acumulan en ciertos campos.  
La reformulación de concepciones tradicionales y la generación de nuevas perspectivas acerca de la inteligencia y el pensamiento en la vejez constituyen hoy un nuevo desafío para la psicología del Desarrollo

 

 

Avances de las nuevas propuestas de investigación

La evaluación del funcionamiento intelectual desde una perspectiva cuantitativa, y guiada por paradigmas experimentales y pruebas psicométricas que plantean tareas que ponen en juego habilidades espaciales, velocidad de reacción, uso de la memoria a corto plazo, va de la mano de las teorías que sostienen la existencia de un enlentecimiento y declinación de los procesos cognitivos entendidos como consecuencia inevitable y universal del envejecimiento. (Krzemien, Monchietti, Sánchez y Lombardo, 2006)
No obstante, la observación cotidiana muestra una amplia variabilidad interindividual: mientras que algunos adultos mayores presentan pérdidas en ciertos dominios cognitivos, otros mantienen un nivel óptimo de funcionamiento intelectual. Existe evidencia de la presencia de una notable competencia cognitiva en las personas mayores (Berg, Nilsson & Svanborg, 1988; Labouvie-Vief, 1985)
Un aporte interesante en el estudio de la inteligencia en adultos y ancianos fue hecho por Cattell y Horn (Horn & Cattell, 1966; Horn, 1982), quienes investigaron estadísticamente las cualidades de la inteligencia y los cambios de la misma en estudios comparativos según la edad. La inteligencia, según estos autores, estaría compuesta por una multiplicidad de habilidades que pueden ubicarse en dos dimensiones: fluida y cristalizada. La primera depende en mayor medida del componente neurológico y, por ello, fuertemente determinada por el componente biológico, por lo cual se entiende que tendería a declinar con el avance de la edad. La inteligencia cristalizada, en cambio, se relaciona con el lenguaje y el bagaje del conocimiento acumulado durante el proceso de educación y socialización y en contraposición con la fluida, tendería a un menor descenso con el paso de los años, manteniéndose en muchos casos e incluso incrementándose.
Con este modelo es posible superar la dicotomía entre tendencias que suponen que con el aumento de la edad las capacidades cognitivas necesariamente decrecen, y aquellas que postulan que el paso de los años en nada determina a los aspectos intelectuales. Se inicia así la comprensión de las determinaciones socio-ambientales sobre el desarrollo y mantenimiento de las capacidades intelectuales.
Otra línea que intenta un nuevo abordaje de la inteligencia en adultos y ancianos se desprende de los postulados de Piaget, retomados y modificados por diversos autores (Brookfield, 1998; Case, 1992; Labouvie-Vief & Diehl, 2000; Sternberg & Berg, 1992; Sinnott, 1998) quienes consideran que el pensamiento formal no es el último estadio del desarrollo intelectual. El razonamiento del adulto mayor no se agotaría en la lógica formal, y surgiría en muchos casos una mayor riqueza y flexibilidad del pensamiento que resultan fundamentales para la interpretación de las experiencias que dirigen el comportamiento. Otro aporte hacia una visión optimista de las capacidades intelectuales en la vejez proviene de los teóricos del curso vital cuyo enfoque se aleja de la búsqueda de funciones de desarrollo invariantes y unidireccionales para hacer hincapié en otros aspectos como las diferencias individuales, el contexto, la multidimensionalidad de los cambios cronológicos y la plasticidad del funcionamiento intelectual.
En los últimos años, muchos investigadores han intentado profundizar los conocimientos sobre la inteligencia más allá del marco teórico piagetiano. Entre ellos se cuenta un nuevo campo de investigaciones, referidas a lo que han dado en llamar pensamiento Crítico. Un hito en la definición de este pensamiento surge del llamado “Delphi report” (APA, 1990) (Facione 1990), reunión de un grupo de expertos de distintas disciplinas convocados por Peter Facione a partir de la cual se alcanza una caracterización de lo que sería este tipo de pensamiento.
El pensamiento crítico plantea, por un lado, la combinación de ciertas capacidades de razonamiento en el que éste se toma por objeto a sí mismo ampliando de manera óptima su capacidad, con la posibilidad de escapar de visiones rígidas y dogmáticas 
El pensamiento crítico sería entonces ese modo de pensar – sobre cualquier tema, contenido o problema – en el cual el pensante mejora la calidad de su pensamiento al apoderarse de las estructuras inherentes del acto de pensar y al someterlas a estándares intelectuales.
Facione y su equipo (2001) identificaron cinco habilidades centrales para el PC: 1) análisis, 2) evaluación, 3) inferencia, 4) razonamiento inductivo y 5) razonamiento deductivo

 

 

En una investigación pionera en cuanto a la administración del California Critical Thinking Skills Test (CCTST) a una muestra de personas de 65 y más años, , se comprobó que el desempeño de este grupo de adultos mayores - con al menos sus estudios secundarios completos - se ubica entre los percentiles 43 y 54, correspondiente a un grupo de estudiantes adultos del 2º año de instrucción universitaria. (Lombardo, Monchietti, Sánchez, y Krzemien, 2007)

Es dentro de este marco que se encamina el presente proyecto de investigación, con el apoyo de nuevas teorías e investigaciones que presentan una mirada más positiva de la inteligencia y el pensamiento en la vejez. Actualmente se está llevando a cabo la recolección de datos a fin de poner a prueba las hipótesis formuladas: 1) que los adultos mayores presentarían mejor desempeño en los tests de inteligencia cristalizada que en los de inteligencia fluida, 2) que aquellos que alcancen mejor desempeño en los tests de inteligencia cristalizada, también podrían desempeñarse mejor en la evaluación del pensamiento crítico en las dimensiones de inferencia y evaluación, 3) que al contrario, aquellos que logren mejor desempeño en los tests de inteligencia fluida, también se desempeñarían mejor en la evaluación del pensamiento crítico en las dimensiones de razonamiento deductivo y análisis.  
Este proyecto también considera como hipótesis de trabajo que los adultos mayores con mayor nivel educativo y/o estudios realizados, presentarían mejor rendimiento en la evaluación del pensamiento crítico.  
El material recogido hasta el presente confirma, además, la complejidad de la temática abordada a la par que abre nuevos interrogantes para futuras investigaciones.

 

 

Discusión

El propósito del enfoque dado a este trabajo radica en el intento de superar las posturas biologicistas tradicionales que han abordado a la vejez y sus emergencias, apuntando a una visión más positiva de la misma que no focalice en sus aspectos decrementales sino en aquellos que hacen más confortable el atravesamiento de la última etapa de la vida.
El valor que se asigna al saber académico y científico hace que estos postulados impregnen con fuerza determinante el discurso y el conocimiento social. De esta manera, la mirada negativa de propuestas teóricas que sostienen que la vejez se caracteriza sólo por pérdidas, duelos y disminuciones funcionales se traduce en la construcción de representaciones sociales desfavorables, que proponen a quien envejece enunciados identificatorios adversos.
El trabajo de investigación que procuramos desarrollar pretende aportar resultados concretos acerca del alcance y naturaleza del pensamiento, con datos proporcionados directamente por quienes en su envejecer no sólo se encuentran con los devenires propios del paso del tiempo, sino que además deben ocupar el lugar que la sociedad, a partir de las construcciones que va propiciando, le ha preparado.

 

 

Bibliografía

Baltes, P. B. y Schaie, K. W. (1976). On the plasticity of intelligence in adulthood and old age: Where Horn and Donalson fail. American Psychologist, 31, 720-725.
Baltes PB. Wisdom: The orchestration of mind and virtue. Book manuscript, Max Planck Institute for Human Development, Berlin, Germany. 1999.
Brookfield, S. (1998) Understanding and facilitating moral learning in adults. Journal of Moral Educations, 27(3), 283-300.
Commons, M. L. ; Richards, F. A. ; Armon, C. (1984) Beyond formal operations: Late adolescent and adult cognitive development. New York: Praeger.
Denney, N. W. (1982) Aging and cognitive changes. En B. B. Wolman (Ed. ) Handbook Developmental Psychology Englewood Cliffs, (pp. 807-827). NY: Prentice-Hall.
Facione, P. A. (1990). Critical thinking: A statement of expert consensus for purposes of educational assessment and instruction: Executive summary. The Delphi Report. Millbrae, CA: California Academic Press.
Giancarlo, C. A. y Facione P. A. (2001). A look across four years at the disposition toward critical thinking among undergraduate students. The Journal of General Education, 50, (1), 29-55.
Horn, J. L. (1982) Aging of fluid and cristallized intelligence. En F. I. M. Craik, & S. Trehub (Eds. ) Aging and cognitive processes. New York: Plenum Press.
Horn, J. L. ; Cattell, R. B. (1966) Refinement and test of the theory of fluid and cristallized intelligence. Journal of Educational Psychology, 57, 253-270.
Labouvie-Vief, G. (1985). Intelligence and cognition. In J. E. Birren & K. W. Schaie (Eds. ), The handbook of the psychology of aging (pp. 500-530). New York: Van Nostrand Reinhold.
Lombardo, E. ; Monchietti, A; Sánchez, M. Krzemien, D. ; Avance de investigación sobre pensamiento crítico en la vejez. 1º Congreso Internacional de Investigación de la Facultad de psicología de la Universidad Nacional de La Plata, 1-2/11/07, La Plata. CD ROM ISBN 978-950-34-0436-2, pp. 6-15 (publicado en totalidad).
Monchietti, A. & Lombardo E. (2000). Estudio sobre la relación entre discurso científico, discurso social y representación social de la vejez. Revista del Instituto de Investigaciones de la Facultad de psicología, 5(2). Buenos Aires: UBA.
Schaie, K. W. (1994) The course of adult intellectual development. American Psychologist, 49, 304-313.  
Schaie, K. W. (1996). Adult intellectual development: The Seattle longitudinal study. Nueva York: Cambridge University Press

 


IMPORTANTE: Algunos textos de esta ficha pueden haber sido generados partir de PDf original, puede sufrir variaciones de maquetación/interlineado, y omitir imágenes/tablas.

Comentarios de los usuarios



No hay ningun comentario, se el primero en comentar

Articulos relacionados