En el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-IV-TR) se señalan las siguientes características de estos trastornos:
presencia de síntomas que sugieren enfermedad médica;
producción de un malestar clínicamente significativo o deterioro socio-laboral;
no es explicable por enfermedad médica ni por los efectos directos de tóxicos o por trastorno mental.
A diferencia de la simulación y de los trastornos facticios, los síntomas físicos no son intencionados.
Dentro de estos trastornos el DSM-IV-TR incluye:
el trastorno de somatización (histeria o síndrome de Briquet);
el trastorno somatomorfo indiferenciado;
el trastorno de conversión;
el trastorno por dolor;
la hipocondría;
el trastorno dismórfico corporal;
el trastorno somatomorfo no especificado y
el trastorno somatomorfo indiferenciado).
Los trastornos somatomorfos, actualmente denominados trastornos somáticos y relacionados, son un grupo de condiciones en las que las personas experimentan síntomas físicos que son desproporcionados o no están completamente explicados por una condición médica subyacente. Estos síntomas causan un malestar significativo y pueden interferir considerablemente con la vida diaria del individuo.
En el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, 5ª Edición (DSM-5), estos trastornos han sido reorganizados y renombrados para reflejar una comprensión más clara de la interacción entre la mente y el cuerpo.
Tipos Principales de Trastornos Somáticos y Relacionados
Trastorno de síntomas somáticos: Caracterizado por síntomas físicos que son angustiantes y/o resultan en una interrupción significativa del funcionamiento diario, acompañados de pensamientos, sentimientos o comportamientos excesivos relacionados con los síntomas físicos.
Trastorno de ansiedad por enfermedad: Involucra una preocupación excesiva por tener o adquirir una enfermedad seria, aunque los exámenes médicos no revelen una condición seria que explique los síntomas.
Trastorno de conversión (también conocido como trastorno neurológico funcional): Se presenta con síntomas neurológicos, como parálisis, debilidad o convulsiones, que no pueden ser explicados por condiciones médicas neurológicas o por el diagnóstico de otra enfermedad mental.
Trastorno facticio: Anteriormente conocido como síndrome de Munchausen, es una condición en la cual una persona actúa conscientemente como si tuviera una enfermedad física o mental al inventar, autoinfligirse o exagerar síntomas.
Trastorno de dolor somático: Se centra específicamente en el dolor que es severo y desproporcionado o no explicado completamente por una condición médica o psicológica, y está asociado con pensamientos y comportamientos significativos que interfieren con la vida diaria del individuo.
Causas
Las causas de los trastornos somáticos son multifactoriales, incluyendo factores psicológicos como el estrés y el manejo del trauma, junto con influencias biológicas y sociales. La comprensión y el diagnóstico pueden ser desafiantes, ya que los síntomas físicos son reales para el paciente y no simulados.
Tratamiento
El tratamiento para los trastornos somáticos generalmente incluye una combinación de:
Terapia psicológica: Especialmente la terapia cognitivo-conductual, que puede ayudar a los pacientes a manejar sus síntomas y las emociones asociadas.
Manejo médico: Evaluaciones y seguimientos regulares, pero evitando procedimientos médicos innecesarios y excesivos.
Medicamentos: Los antidepresivos pueden ser útiles para algunos pacientes, especialmente aquellos cuyos síntomas incluyen dolor o depresión.
Educación y apoyo: Informar a los pacientes y a sus familias sobre la naturaleza de la enfermedad puede ayudar a reducir la ansiedad y a mejorar el manejo de los síntomas.
El objetivo del tratamiento es mejorar la calidad de vida del paciente, ayudar a manejar los síntomas y reducir cualquier preocupación y comportamiento relacionado con los síntomas.