Definición:
Constituye el delirio de la paranoia de Emil Kraepelin. Este autor, en la octava edición de su tratado describió la paranoia como el desarrollo insidioso, originado por causas internas, de un sistema delirante permanente e inamovible, que cursa con plena conservación de la claridad y del orden del pensamiento, en la voluntad y en la conducta.
De la misma manera que los delirios parafrénicos, la clasificación francesa la incluye dentro de los denominados delirios crónicos. En el DSM-IV TR y en la CIE 10, la paranoia para a llamarse trastorno delirante (paranoide) y trastorno de ideas delirantes, respectivamente.
Para Henry Ey este delirio, que forma parte de lo que la escuela francesa llama psicosis delirantes sistematizadas, se caracteriza por:
1) La continuidad del delirio paranoico y de la personalidad. El carácter constitucional del delirio. Hay íntimas relaciones entre la personalidad y el delirio.
2) El tema dramático fundamental es el tema de la persecución. Incluso cuando el tema sea megalomaníaco, la persecución siempre estará presente, se le perseguirá porque se le envidia su grandeza. Sin embargo este carácter persecutorio no existe en el tipo somático de este delirio.
3) El desarrollo de este delirio es coherente y sistemático. De ahí que las interpretaciones de tipo psicoanalítico hayan abundado para explicar este delirio.
4) Ausencia de evolución demencial. No obstante con el tiempo el delirio pierde actividad, se empobrece, es lo que Henry Ey llama cristalización del delirio. Su estructura es afectiva.
5) Ausencia de un trastorno paralógico del pensamiento. En todo momento el delirio va a tener el aspecto del pensamiento normal.
Los delirios paranoicos pueden clasificarse en los siguientes tipos:
1) Tipo erotomaníaco. Sinónimo: De Clérambault (síndrome de). El tema predominante es la idea delirante de que una persona, generalmente de una condición social o económica más alta, está enamorada del sujeto. Son frecuentes los intentos de contactar con la persona objeto del delirio a través de cartas, llamadas de teléfonos, visitas o incluso el acecho y la vigilancia. La mayoría de los sujetos con este delirio son mujeres.
2) Tipo de grandiosidad. En el que el tema predominante es una sobrevaloración del poder propio, los conocimientos propios, el haber hecho un descubrimiento importante, o una relación especial con una persona famosa o una divinidad.
3) Tipo celotípico. Sinónimo: Otelo (síndrome de) .El tema fundamental es la infidelidad de la pareja. El sujeto suele intervenir coartando la libertad de la pareja, siguiéndola en secreto o agrediéndola.
4) Tipo persecutorio. En el que el tema central es que la persona delirante o alguien cercano a ella es objeto de persecución, es engañado, seguido, envenenado, calumniado. A veces adquiere la forma de paranoia querulante, es decir el sujeto cree que ha sido objeto de una injusticia que se intenta remediar con continuas apelaciones a los tribunales.
5) Tipo somático. Sinónimo: delirio hipocondríaco. El delirio está centrado en la convicción de que se tiene un defecto o enfermedad física. Los más frecuentes son la creencia de que se emite un olor insoportable, que se tiene una infestación por insectos dentro o fuera de la piel, que tiene un parásito interno, que hay partes de su cuerpo que no funcionan, que tiene una parte del cuerpo (nariz, genitales, etc.) deformes cuando esto no es lo que se observa.
6) Tipo inespecífico. Cuando no se ajusta a los anteriores.