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En el ojo del huracán, la historia de un maltrato.

Autor/autores: Regina Sala Cassola
Fecha Publicación: 01/03/2005
Área temática: Psiquiatría general .
Tipo de trabajo:  Conferencia

RESUMEN

La violencia de género es un tema que se encuentra de actualidad en nuestra sociedad. Multiples artículos, programas de televisión se ocupan del tema. Resulta difícil no caer en los dos extremos, considerar a las mujeres que han vivido en una situación de maltrato físico y psicológico como pobres víctimas inocentes; o por el contrario considerarlas incapaces sociales que repiten los mismos patrones una y otra vez. Hemos realizado una búsqueda bibliográfica en las revistas de mayor impacto internacional de los últimos diez años, con el fin de determinar los rasgos más relevantes de la personalidad de las mjeres que conviven con el maltrato y los pasos más significativos por los que éste maltrato llega a instaurarse.

La violencia de género se encuentra hoy en día en todos los medios de comunicación, siendo objeto de numerosos estudios. Las cifras que se revelan son alarmantes, siendo especialmente llamativos los casos de asesinato de mujeres por parte de sus parejas. Pero esto sólo es la punta del iceberg, puesto que la violencia de género cubre una mayor gama de actos. Así, se considera violencia contra la mujer el daño físico, psíquico o sexual a la mujer; el sufrimiento, causado por actos o por amenaza de dichos actos, coerción o privación de la libertad, tanto en la vida pública como en la privada. Muy frecuente resulta el abuso de la mujer por parte de un miembro masculino de su entorno cercano, sucediendo este abuso en la niñez, adolescencia o edad adulta. Debemos considerar que el maltrato físico llevado a cabo por la pareja en el seno de una relación va acompañado en la mayoría de los casos de abuso psicológico, y en un cuarto de las ocasiones, de abuso sexual. Algunas formas de violencia de género, tales como el maltrato físico, la penetración forzada (la violación), el contacto sexual forzado y el abuso sexual de un niño se consideran como crímenes.

Palabras clave: maltrato


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En el ojo del huracán, la historia de un maltrato.

Cristina García Blanco; Regina Sala Cassola; Natalia Neira Laredo; Fernando García Sanchez; Susana Martín Alcudia.

CSM Alcorcón. Madrid

 

Resumen

La violencia de género es un tema que se encuentra de actualidad en nuestra sociedad. Multiples artículos, programas de televisión se ocupan del tema. Resulta difícil no caer en los dos extremos, considerar a las mujeres que han vivido en una situación de maltrato físico y psicológico como pobres víctimas inocentes; o por el contrario considerarlas incapaces sociales que repiten los mismos patrones una y otra vez. Hemos realizado una búsqueda bibliográfica en las revistas de mayor impacto internacional de los últimos diez años, con el fin de determinar los rasgos más relevantes de la personalidad de las mjeres que conviven con el maltrato y los pasos más significativos por los que éste maltrato llega a instaurarse.



La violencia de género se encuentra hoy en día en todos los medios de comunicación, siendo objeto de numerosos estudios. Las cifras que se revelan son alarmantes, siendo especialmente llamativos los casos de asesinato de mujeres por parte de sus parejas. Pero esto sólo es la punta del iceberg, puesto que la violencia de género cubre una mayor gama de actos. Así, se considera violencia contra la mujer el daño físico, psíquico o sexual a la mujer; el sufrimiento, causado por actos o por amenaza de dichos actos, coerción o privación de la libertad, tanto en la vida pública como en la privada. Muy frecuente resulta el abuso de la mujer por parte de un miembro masculino de su entorno cercano, sucediendo este abuso en la niñez, adolescencia o edad adulta. Debemos considerar que el maltrato físico llevado a cabo por la pareja en el seno de una relación va acompañado en la mayoría de los casos de abuso psicológico, y en un cuarto de las ocasiones, de abuso sexual. Algunas formas de violencia de género, tales como el maltrato físico, la penetración forzada (la violación), el contacto sexual forzado y el abuso sexual de un niño se consideran como crímenes. (1)


¿Cuál es la causa de la violencia de género?

Responder esta pregunta no resulta en absoluto sencillo. Existe un cúmulo de factores que, sin ser causales, van a cooperan para permitir la aparición de la violencia. Por una parte se encuentras los factores personales, tales como la personalidad del sujeto, la educación recibida y la posible psicopatología; por otra existirán una serie de factores culturales condicionantes de la aparición del maltrato. (1)

Puede resultar curiosos hablar en el siglo XXI, en el mundo occidental, de factores culturales que permiten el maltrato, pero, a pesar de lo que pueda parecer, existen remanentes en la cultura occidental que no han conseguido ser eliminados, que mantienen una desigualdad entre los sexos. Muchas culturas sostienen que los hombres tienen derecho a controlar el comportamiento de sus esposas, desafiando éstas ese derecho al pedir dinero o expresando necesidades, como el deseo de tener hijos, y que eso hace necesario que sean castigadas. Los estudios han localizado, por todo el mundo, una serie de actos que “merecen castigo”, de los cuales sería un ejemplo: desobedecer al esposo, hablar por la espalda de temas conyugales, no tener lista la comida a tiempo, no cuidar adecuadamente al esposo o a los hijos, preguntar sobre gasto de dinero o posibles infidelidades, ir a alguna parte sin su permiso, rechazar el sexo. (1) (2).

Así, la creencia cultural, las normas y las instituciones sociales pueden legitimar, por tanto, perpetuar la violencia de género.

Podemos hablar así de violencia de genero, violencia doméstica, terrorismo patriarcal; se puede considerar una manera de ejercer poder o dominación por parte del varón sobre su pareja o ex pareja. Se trata de un problema universal, que requiere un amplio abordaje, dada la enormidad del problema, el contexto patriarcal sobre el que se desarrolla y el alto grado en el que nuestra sociedad perdona dicha violencia. (3)


Consecuencias de la violencia de género

Podemos hablar tanto de consecuencias físicas como psíquicas.

Se observan lesiones tales como huesos rotos, ligamentos rasgados, laceraciones, pérdida de audición y visión, epilepsia y artritis crónica. (3). Favorece la aparición de dolor crónico, abuso de drogas y alcohol. Resulta frecuente la aparición de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual. (1)

Los daños psíquicos han sido objeto de numerosos estudios. Se trata de un tema delicado, puesto que existe reticencia a la hora de diagnosticar patología psiquiátrica a mujeres que han sido objeto de la violencia de género; esto es debido a que el estigma de “estar loco” puede ser utilizado para racionalizar la situación, aumentando la tendencia a la culpabilización y revictimización de la mujer. Antiguos estudios tachaban a estas mujeres como mentalmente inestables y masoquistas, cosa que la literatura moderna ha tratado de desmentir. (4).

Las mujeres en situación de maltrato indican a menudo que ellas no son las locas, que si alguien está loco es su pareja. Los modernos estudios llevados a cabo sobre mujeres en situación de maltrato señalan que no existe un número de antecedentes psiquiátricos en estas mujeres mayor al de la población en general, considerando entre ellos los trastornos de personalidad. Un golpe de gracia para una mujeres víctima de la violencia de género puede ser considerado mentalmente enferma debido a su situación. (4)

Estas mujeres presentan conductas que fuera de contexto podrían ser indicativas de patología mental y que en este caso se trata de mera adaptación de supervivencia. Tal sería el caso de conductas paranoias en el caso de mujeres perseguidas por sus ex cónyuges. (4) (5)

Las mujeres maltratadas presentan temor a ser etiquetadas como enfermas mentales debido a su situación. Esto no es óbice para que no sean tratados los posibles síntomas psiquiátricos que aparecieran en las mismas. Se ha observado una elevada incidencia de patologías, tales como depresión, con elevadas tentativas de suicidio, trastornos por ansiedad, fobias, ideación paranoide y cuadros psicóticos. (4)

Muy importante será evitar la yatrogenia en el tratamiento de estas mujeres, siendo necesaria una actitud comprensiva y empática (6)


Medidas de intervención

Se han intentado diversos métodos para reducir lo máximo posible la violencia de género y sus consecuencias.
Muy importante será el apoyo a la mujer maltratada, mediante una adecuada red de ayuda, ; se han propuesto métodos, tales como apoyo telefónico, con buenos resultados (7). Muchas mujeres buscan ayuda para ellas y sus hijos, recurriendo a los servicios policiales y jurídicos (3). El trato por parte de los servicios sanitarios es crucial en la mejoría de las mujeres víctimas de la violencia de género. Se observa, asimismo, la importancia de la espiritualidad como apoyo en un gran número de casos (8), siendo definida como un sostén y un consuelo.

El endurecimiento de las leyes, el cambio progresivo de la opinión pública, pueden resultar decisivos en la prevención de la violencia de género, así como pueden resultar una ayuda inestimable para mejorar la situación de estas mujeres.


Conclusión

Durante mucho tiempo se ha considerado a las mujeres víctimas de la violencia de género como enfermas mentales personalidades débiles que poco menos provocaban dicho maltrato. Hoy en día los modernos estudios permiten apreciar la verdadera dimensión de las cosas, facilitando la detección y tratamiento de la patología asociada a esta situación. Así como la prevención y ayuda de futuros casos.


Bibliografía

1. Prabhakar U. Violence against women. Nursing Journal of India. Jul 2003. Nº 7; pag 157.

2-Celani DP. Applying Fairbairn’ s object relations theory to the dynamics of the battered woman. American Journal of Psychotherapy. Winter 1999. Nº1; pag 60.

3. Sullivan CM. Using the ESID model to reduce intimate male violence against women. American Journal of Community Psychology. Dec 2003. Nº3-4; pag 295.

4. May BA. Are abuser women mentally ill? Journal of Psychosocial Nursing & Mental Health Services. Feb 2003. Nº2; pag 21.

5. Yoshihama M. Battered women’s coping strategies and psychological distress: differences by inmigration status. American Journal of Community Psychology. Jun 2002. Nº·; pag 429.

6. Bell H. Strenths and secondary trauma in family violence work. Social work. Oct 2003. Nº4; Pag 513.

7. Anonymous. Telephone intervention works to stop intimate partner violence. Journal of Psychosocial Nursing & Mental Heath Services. Jun 2004. Nº6; pag 12.

8. Humphreys J. Spirituality and distress in sheltered battered women. Journal of Nursing Scholarship. 2000. Nº3; pag 273

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