En la actualidad los trastornos de la ingesta suponen una fuente de interés, médicos, psicólogos, psiquiatras y demás profesionales de la salud que trabajan en el ámbito clínico. En general, parecen más frecuentes de lo que podríamos sospechar ya que los datos epidemiológicos indican que, e la sociedad occidental sufren de anorexia nerviosa entre un 0. 2 y un 0. 8% de personas de la población general y entre el 1 y 2% de la población adolescente de sexo femenino (Toro, J. 1996).
Por todo ello, no debe sorprendernos que en la población universitaria de todo el mundo, aparezcan con frecuencia este tipo de problemas de carácter patológico. Dado que los jóvenes estudiantes, llegan a la universidad en edad adolescente, y como sabemos, esta etapa de la vida es un período evolutivo complicado, en el que se producen grandes cambios, tanto a nivel biológico o madurativo como psicológico y social. Además, es esta una etapa en la que los jóvenes comienzan a plantearse temas tan importante como el futuro tanto académico como profesional, así como temas más personales como la identidad como individuos sociales. Nosotros, llevamos trabajando con adolescentes universitarios desde el año 94 y con adolescentes con trastornos alimentarios desde el 91.
Universidad Europea- CEES