Trastornos de la conducta alimentaria e internet: Una relación peligrosa.

Trastornos de la conducta alimentaria e internet: Una relación peligrosa.

E. Muriel Patino; M. J. Campo Pérez.

Resumen

Con motivo de la celebración del I Congreso Nacional sobre anorexia y bulimia en Internet (Madrid, Mayo de 2005, iniciativa de la Asociación Protégeles) nos planteamos llevar a cabo una revisión pormenorizada acerca del uso de Internet en relación con los Trastornos de la conducta Alimentaria (TCA). Hemos sistematizado nuestro estudio en una doble vertiente: por un lado, la utilización de Internet para difundir información, conductas, consejos y otras formas de apología de los TCA. En contraposición, analizamos las posibilidades que brinda Internet como medio de prevención de conductas alimentarias anómalas y de desmitificación de los consejos que envían las páginas web partidarias de los TCA como ideales de vida.  

Nuestro trabajo pretende ofrecer una visión amplia del estado actual del tema con objeto de plantear un análisis de las posibles alternativas para abordar esta nueva forma de apología de los TCA. Así mismo, describimos detalladamente las diferentes formas de prevención desde Internet, con las ventajas e inconvenientes que ello supone.

Finalmente, concluimos que, si bien Internet puede servir de ayuda en la vertiente preventiva de los TCA, en nuestros días cobran mayor importancia los usos de Internet en la línea pro-TCA, no sólo por el volumen de páginas web al respecto sino, fundamentalmente, por el contenido de las mismas. Por tanto, cualquier abordaje de los TCA que se realice en la actualidad, ya sea desde la prevención, desde el diagnóstico, desde el tratamiento o desde la reinserción social, debería contemplar el potencial de Internet como favorecedor de los TCA.



En nuestros días, no supone ningún esfuerzo encontrar un lugar en la red de redes que haga apología de los TCA. Con un planteamiento general o centradas en aspectos específicos (tales como la pérdida de peso, las pautas de ejercicio físico, los consejos para ocultar la enfermedad y un sinfín de puntos más) son miles y miles las páginas web pro-TCA que existen y, por desgracia, que proliferan cada día. Iniciativas como las llevadas a cabo por la Asociación Protégeles en colaboración con el Área del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid han permitido el cierre de cientos de estas páginas, pero no es suficiente.  

Tal vez lo más preocupante de esta situación, al margen del análisis minucioso de los contenidos que conforman dichas páginas web, sea el acceso a las mismas por parte de, en su mayoría, menores de edad. Según un estudio llevado a cabo por Protégeles, el 68% de las usuarias son adolescentes con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años. Este hecho, junto al no menos importante de que la mayoría de estas chicas se encuentran en una fase inicial de la enfermedad, tiene que convertirse en el foco prioritario de atención para cualquier estrategia preventiva que se inicie en este ámbito.  

En la actualidad, las llamadas páginas web pro-TCA engloban tres categorías diferentes: lugares pro-ANA, lugares pro-MÍA y lugares pro-SI. Una terminología críptica que forma parte de dicho mundo y que no es más que una forma de referirse a la anorexia y bulimia Nerviosas (“Ana” y “Mía”, respectivamente) y a las autolesiones provocadas en el seno de los TCA (“SI”, de las iniciales anglosajonas de “Self Injury”).  

Con estas pinceladas podemos tener una primera aproximación a lo que es la situación actual del tema que nos ocupa: en un entorno en el que la utilización de Internet por parte de los jóvenes es ya la norma y no una excepción, proliferan diariamente los lugares virtuales que difunden estilos de vida muy peligrosos. Sin control de ningún tipo y reforzados por el “efecto grupo” que se va creando entre los usuarios de estas páginas web, se lanza la idea de que la única forma posible de vida es la que se inspira en esas actitudes, en esas ideas y en esos valores. ¿Estilo de vida o enfermedad? Una pregunta difícil de responder. La realidad es que el impacto de los mensajes, testimonios, recomendaciones y demás información que se puede extraer de las páginas pro-TCA puede resultar dramático para unos usuarios en pleno proceso de formación y desarrollo.  

La otra vertiente que nos ofrece Internet en nuestros días es como medio de prevención de conductas alimentarias anómalas y de desmitificación de los consejos que envían las páginas web partidarias de los TCA como ideales de vida. Diversos especialistas (casi siempre desde el seno de Asociaciones u Organizaciones de ayuda) ofrecen la posibilidad de resolver dudas y de responder a demandas específicas de los usuarios a través de otro tipo de páginas web que nada tiene que ver con las anteriores. Hay que destacar también la puesta en funcionamiento de páginas específicas que, siguiendo la presentación y combinando los elementos de reclamo muy bien conocidos por los lugares web pro-TCA, ofrecen argumentos contundentes para rebatir los falsos mensajes que éstas lanzan. Tal es el caso de las páginas www. anaymia. com (orientada sobre todo a la prevención) y www. anaymia. com (elaborada según la estructura y la dinámica de las web pro-TCA), ambas desarrolladas por la ya citada Asociación Protégeles en colaboración con otros Organismos (entre ellos el también citado Defensor del Menor de la comunidad de Madrid).

Esta otra vertiente, en contraposición con la anterior, tiene un desarrollo mucho más lento y, sin duda, mucho más controvertido, pues hay quienes opinan que no es el medio ni la forma más adecuados para emprender una lucha contra los poderosos TCA.  

En resumen, nos encontramos en una encrucijada de páginas web que nos muestran los TCA como estilos de vida (únicos posibles para el triunfo) y otras que pretenden acabar con este falso ideal y con los falsos valores que albergan esos estilos de vida. Hoy por hoy, la mayoría de usuarios de Internet en relación con los TCA resuelven la encrucijada optando por los caminos pro-TCA, aventajando con mucha diferencia a los que eligen seguir la otra vertiente que ya hemos comentado.

Internet como medio de apología de los TCA

Tal y como se ha señalado en el resumen de este artículo, con motivo de la celebración del I Congreso Nacional sobre anorexia y bulimia en Internet (Madrid, Mayo de 2005) nos planteamos llevar a cabo una revisión pormenorizada acerca del uso de Internet en relación con los TCA. Después de analizar detenidamente muchos de esos lugares pro-TCA que se pueden encontrar en Internet en nuestros días, llegamos a la conclusión de que el contenido de los mismos puede ser sistematizado en seis categorías. Estas categorías coinciden por las propuestas por Protégeles en el Congreso referido con anterioridad. No todas las páginas ofrecen todas las categorías, muchas de ellas se centran en una o dos de ellas, pero en casi todas podemos vislumbrar pinceladas o elementos que se integrarían en estas seis categorías y que a continuación detallamos:

1. Foros: Se trata de la categoría que cobra mayor relevancia junto a la siguiente y que aparece de forma casi invariable en todas las páginas web pro-TCA. En apariencia no son más que “tablones de anuncios” donde cada usuario puede expresar lo que quiera, pedir consejo, informar al resto del grupo de las cuestiones más variopintas en relación con los TCA, etc. En una jerga que bien podría incluirse en uno de estos foros, si se nos permite el juego conceptual, “todo vale”. Ahora bien, si analizamos con detenimiento las implicaciones de estos foros, podemos establecer que:

- Refuerzan el concepto de “grupo”. En otras palabras, proporcionan una “identidad” común para todos los que se implican en el foro.

- Esta identidad es definida al margen del TCA, ya que se desarrolla muy cuidadosa y explícitamente la idea del estilo de vida al que ya nos hemos referido con anterioridad.  

- Los participantes se integran, de modo tal vez inconsciente al principio, en un sistema de competición constante que desemboca en una jerarquización de los miembros. Para ascender en la jerarquía no hay más que ser fiel al estilo de vida propuesto, todo “logro” será bien recibido en lo que a ese ascenso se refiere.

- En el foro se encuadran mensajes confusos que en apariencia pueden hablar por ejemplo, de una dieta muy simple y luego desembocan en recomendaciones para la autolesión. Se incluyen también links diversos que, de entrada, puede parecer que no guardan ninguna relación con los TCA y que el destino final es un nuevo lugar pro-ANA, pro-MÍA o pro-SI.  

Por todo esto, la categoría “foro” es una constante en las páginas web que hacen apología de los TCA. Ofrece la posibilidad de comunicación de forma anónima, bajo algún apodo o adoptando una falsa identidad. Se ofrece información, se recogen nuevos consejos, se resuelven dudas y un sinfín de posibilidades más, pero, sobre todo, se fomenta la pertenencia a un grupo y el apoyo incondicional del mismo. En definitiva y, una vez más, todo vale.

2. Tips: Mantenemos la denominación asignada por las propias páginas web para esta segunda categoría. Revisando algunas de las publicaciones al respecto, una traducción aproximada que nos habla del significado de este concepto es la de “trucos de inspiración”. Si tuviéramos que designar a alguna de las categorías como la más peligrosa, falsa e infundada, sería esta. Los “tips” ofrecen información falsa, sin ningún rigor científico, que comportan riesgo para la salud, que invitan, incitan e, incluso, instan al engaño de las personas del entorno (los considerados “enemigos”, sobre todo: familiares, amigos, médicos y profesores). Por si fuera poco, en esta categoría se detallan rituales que, de ser seguidos por los usuarios, serán siempre muy difíciles de revertir porque consiguen esclavizar de un modo u otro. Para ilustrar todo esto, recogemos uno de estos “tips”, al azar, de entre los innumerables que podríamos haber elegido y que no necesita, desde nuestro punto de vista, ningún comentario añadido: “Ayuna durante 28 días. El músculo perderá cuerpo y ya no tendrás que preocuparte más por su peso. Sólo será cuestión de seguir ayunando. El contorno muscular se mantiene por un año, sin necesidad de hacer ejercicio. ”

3. Dietas: Esta categoría es tan infundada y peligrosa como la anterior. Se trata de dietas muy repetitivas, siempre con las mismas falacias y recogiendo muy pocos alimentos como “permitidos”. La distribución de las comidas a lo largo de la jornada suele ser respetada, pero, por lo que hemos podido recoger en nuestro análisis y aunándolo con la información de los foros, concluimos que este hecho responde a la necesidad de cumplir los horarios establecidos para las comidas en el seno familiar o, en su caso, escolar. Las páginas pro-TCA consideran que una dieta tiene que tener un porcentaje mínimo de calorías al día e incluir muy pocos alimentos, la mayoría de ellos líquidos. De nuevo nos encontramos ante un peligroso estilo de vida.

4. Contenidos pro-SI: Esta categoría es la más difícil de encontrar (dentro de lo accesible que es todo este ámbito, como ya hemos reiterado en varias ocasiones). Como elementos comunes una vez descubierta hemos encontrado los tres siguientes:

- Proponen la utilización del dolor como forma de “quemar” calorías y, lo más importante, como forma de autocontrol.

- Albergan afirmaciones falsas y carentes de rigor científico (por ejemplo: relacionadas con la redistribución de la masa corporal tras auto-infringirse un daño físico).

- Si las instrucciones que recogen son seguidas por el usuario, desembocan tanto en lesiones físicas (recogidas en muchas ocasiones en fotografías dentro de esta misma categoría, como “modelo” para cumplir bien las instrucciones y para resolver cualquier duda al respecto) como en daños psicológicos importantes a corto plazo y, muchos de ellos, irreversibles o reversibles pero con secuelas relevantes.

5. personificación y parafernalia: categoría que desarrolla aspectos relacionados, por un lado, con el sentido de pertenencia al grupo y de identidad particular (pulseras de colores específicos para la anorexia y para la bulimia Nerviosas, lazos de otro color específico para ambos trastornos que se ubicará en lugares no menos específicos del material escolar empleado por los usuarios diariamente, etc. ) y, por otro, con dotar de categoría de persona a la propia enfermedad (el ejemplo más claro de este aspecto lo tenemos en la propia denominación “Ana y Mía”).

6. inspiración e idolatría: casi siempre se trata de una sección fotográfica en la que aparecen diversos “modelos” que encarnan ese estilo de vida propuesto, casi siempre modelos, actrices y cantantes.

Como ya hemos dicho, estas categorías han sido también desarrolladas por Protégeles en el marco de un estudio elaborado para el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid. La página web de dicha asociación es www. protegeles. com

Con todo lo anterior, podemos concluir este apartado afirmando que, como medio de apología de los TCA, Internet es un vehículo muy poderoso y peligroso. Ofrece un marco de acogimiento y dota de un sentido de identidad incondicional a aquellos dispuestos a embarcarse en la aventura de un estilo de vida que, a simple vista, sólo ofrece ventajas. Los profesionales que estemos de algún modo u otro vinculados a los TCA no debemos olvidar esta realidad creciente, ya que puede convertirse en una enemiga más poderosa que la propia enfermedad en sí a la hora de plantear una intervención terapéutica o una estrategia preventiva.

Internet como medio de prevención de los TCA

En contraposición a lo recogido hasta ahora, en este apartado analizamos las posibilidades que brinda Internet como medio de prevención de conductas alimentarias anómalas y de desmitificación de los consejos que envían las páginas web partidarias de los TCA como ideales de vida. Como ya ha quedado recogido, esta otra vertiente se sitúa en una clara desventaja con respecto a la anterior. Aparte de los foros de autoayuda albergados en las páginas web de diversas Asociaciones de lucha contra los TCA (siendo el más conocido el propuesto por la Asociación ADANER) y que no dejan de contar con visitas esporádicas, puntuales e incluso por mera curiosidad, las perspectivas de futuro apuntan a la creación de lugares en los que las personas que necesiten ayuda se vean acogidas con la misma calidez con que brindan los lugares pro-TCA en un primer momento. La controversia al respecto está servida, porque la línea que separa este planteamiento con el de ofrecer pseudotratamientos a través de la red y otras cuestiones lucrativas es muy fina, a veces inexistente. Sin embargo, los espacios creados desde la responsabilidad y ética profesionales ofrecen una serie de resultados que, lejos de merecer algún reproche, abren un nuevo camino hacia la prevención de los TCA y, dando un paso más, hacia el fin de las páginas web pro-TCA. Tomando como modelo la labor de Protégeles, desde Internet se puede ofrecer una primera atención personalizada fundamentada en los pasos siguientes:

1. Aproximación al problema (diagnóstico, enumeración de problemas por separado).

2. Concienciación.

3. Motivación hacia el tratamiento.

4. Información sobre recursos de intervención.

5. Recomendaciones bibiliográficas.

El desarrollo de estos puntos ha sido recogido en el estudio “la prevención de la anorexia y la bulimia en Internet: Primera atención Personalizada”.  

Desde nuestro punto de vista y una vez desarrollado nuestro trabajo de análisis de la relación TCA-Internet consideramos que las iniciativas preventivas a través de la red son necesarias en un mundo en el que el acceso a Internet cada vez es más generalizado. Si bien hay empresas que se encargan de velar por la seguridad de los contenidos que la red ofrece, lo cierto es que no podemos contar con una disponibilidad segura al 100% de contenidos fundamentados, reales, inocuos o al menos, de rigor científico. Ante esta situación, el hecho de que se pueda emprender una lucha desde el mismo ámbito y supliendo esa carencia de fundamentación y de rigor científico abre una nueva vía futura para afrontar con mayores recursos la guerra abierta contra los TCA.

Conclusiones

Hemos llevado a cabo una revisión pormenorizada acerca del uso de Internet en relación con los Trastornos de la conducta Alimentaria (TCA). Se ha sistematizado nuestro estudio en una doble vertiente: por un lado, la utilización de Internet para difundir información, conductas, consejos y otras formas de apología de los TCA. En contraposición, analizamos las posibilidades que brinda Internet como medio de prevención de conductas alimentarias anómalas y de desmitificación de los consejos que envían las páginas web partidarias de los TCA como ideales de vida. La primera vertiente es la que cuenta en nuestros días con más adeptos. El secreto del éxito es múltiple, pero tal vez lo que no podemos pasar por alto es la disyuntiva que podemos enunciar como “TCA: ¿estilo de vida o enfermedad?”. La prevención de los TCA a través de Internet es una esperanzadora apuesta de futuro no exenta de polémica. De cualquier modo, es innegable que Internet forma parte de nuestras vidas y que, por tanto, sería más que deseable contar con este medio como forma de lucha contra los TCA, ya sea desde la prevención o desde la contra-argumentación de las ideas pro-TCA.

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