La psiquiatría de consulta y enlace nace a raíz de la ? re-inserción? de la psiquiatría dentro de los hospitales generales. Se la considera una sub-especialidad psiquiátrica, un terreno de entrecruzamiento entre la medicina general y la psiquiatría. La ultraespecilización de la tarea médica que se produjo gracias al avance científico y tecnológico no ha podido absorber los aspectos psicológicos y sociales de la persona enferma. La tarea del profesional de interconsulta es atender los aspectos biológicos, psicológicos y sociales de la misma; se trata por lo tanto de establecer una ?ligazón?, una ?unión? entre estos tres aspectos.
Como se comprenderá no es una tarea sencilla y para llevarla a cabo se requiere de la colaboración de otros profesionales y auxiliares. La psiquiatría de consulta y enlace nace a raíz de la ? re-inserción? de la psiquiatría dentro de los hospitales generales. Se la considera una sub-especialidad psiquiátrica, un terreno de entrecruzamiento entre la medicina general y la psiquiatría. La ultraespecilización de la tarea médica que se produjo gracias al avance científico y tecnológico no ha podido absorber los aspectos psicológicos y sociales de la persona enferma. La tarea del profesional de interconsulta es atender los aspectos biológicos, psicológicos y sociales de la misma; se trata por lo tanto de establecer una ?ligazón?, una ?unión? entre estos tres aspectos. Como se comprenderá no es una tarea sencilla y para llevarla a cabo se requiere de la colaboración de otros profesionales y auxiliares. El objetivo de este trabajo es tratar de mostrar el rol del interconsultor en nuestro hospital a través de situaciones clínicas cotidianas.