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Personalidad y sucesos vitales negativos en la adolescencia.

Autor/autores: A.M. Viruela
Fecha Publicación: 01/03/2010
Área temática: Infantiles y de la adolescencia, Trastornos infantiles y de la adolescencia .
Tipo de trabajo:  Conferencia

RESUMEN

El objetivo del estudio es clarificar la posible relación existente entre la personalidad y los sucesos vitales negativos o estresantes experimentados. A la muestra de 392 adolescentes, entre 14 y 18 años, estudiantes de educación secundaria en centros de Valencia, Castellón y provincia, se les administró el cuestionario de personalidad JS ? NEO, el cuestionario de sucesos vitales negativos CEVE y el instrumento PSSS que recoge el nivel de estrés percibido. El estudio analizó las dimensiones y facetas de personalidad según el modelo de 5 factores de Costa y McCrae, la frecuencia y el grado de afectación de 41 sucesos vitales (datos que recoge el CEVE) y el nivel general de estrés percibido.

Los resultados obtenidos indican que las dimensiones de personalidad de neuroticismo, extraversión y Amabilidad, influyen en el número de sucesos vitales negativos experimentados. Asimismo, una mayor frecuencia de sucesos experimentados se asocia a mayor estrés percibido, pero no al grado de afectación de estos hechos informado por los adolescentes. Por otra parte, el grado de afectación se relaciona con el neuroticismo y amabilidad, y el estrés percibido únicamente con el neuroticismo. En general, los resultados del estudio indican que en la adolescencia, existe relación entre la personalidad y la frecuencia y el grado de afectación de sucesos vitales negativos y el nivel de estrés percibido. Así, sería relevante enseñar a los adolescentes cómo prevenir consecuencias negativas o patologías futuras, influenciadas por sucesos negativos o por un alto estrés percibido, según sus rasgos de personalidad.

Palabras clave: personalidad,estrés, neuroticismo, extraversión,afectación


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PERSONALIDAD Y SUCESOS VITALES NEGATIVOS EN LA ADOLESCENCIA

Viruela AM, Moya J, Ibañez MI, Mezquita L, Ortet G.
Dept. psicología Básica, Clínica y psicobiología, Universitat Jaume I, Castellón (España).
viruela@psb. uji. es


RESUMEN:
El objetivo del estudio es clarificar la posible relación existente entre la personalidad y los sucesos
vitales negativos o estresantes experimentados. A la muestra de 392 adolescentes, entre 14 y 18
años, estudiantes de educación secundaria en centros de Valencia, Castellón y provincia, se les
administró el cuestionario de personalidad JS ­ NEO, el cuestionario de sucesos vitales negativos
CEVE y el instrumento PSS que recoge el nivel de estrés percibido.
El estudio analizó las dimensiones y facetas de personalidad según el modelo de 5 factores de Costa
y McCrae, la frecuencia y el grado de afectación de 41 sucesos vitales (datos que recoge el CEVE) y
el nivel general de estrés percibido. Los resultados obtenidos indican que las dimensiones de
personalidad de neuroticismo (N), extraversión (E) y Amabilidad (A), influyen en el número de
sucesos vitales negativos (SV) experimentados. Conforme aumenta la frecuencia de SV vividos
aumenta el grado de afectación total (asociado a una alta A) y el estrés percibido, que a su vez, se
relaciona con N, E y el grado de afectación total de los SV.
En general, los resultados del estudio indican que en la adolescencia, existe relación entre la
personalidad y la frecuencia y el grado de afectación de sucesos vitales negativos y el nivel de estrés
percibido. Así, sería relevante enseñar a los adolescentes cómo prevenir consecuencias negativas o
patologías futuras, influenciadas por sucesos negativos o por un alto estrés percibido, según sus
rasgos de personalidad.


ABSTRACT:
The present study aimed to clarify the possible relationship between personality and negative or
stressor life events experienced in adolescence. A sample of 392 adolescents, between 14 and 18,
students in high school centers of Valencia, Castellon and the province, were answered the
questionnaire of personality JS NEO, the questionnaire CEVE evaluating negative life events and the
PSS that collects the level of perceived stress.
The study examined the dimensions and facets of personality according to the model of 5 factors by
Costa and McCrae, the frequency and degree of impact of 41 life events and the overall level of
perceived stress. The results indicate that the personality's dimensions of Neuroticism, Extraversion
and Agreeableness, influence the number of negative life events experienced. With an increasing
frequency of life events experienced increases the degree of total impact (also associated with high
Neuroticism and high Agreeableness) and the level of perceived stress, which in turn is related to
Neuroticism, Extraversion, and the degree of total impact.
Overall, the results of our study indicate that in adolescence, there is a relationship between
personality and the frequency and degree of impact of negative life events and the level of perceived
stress. Thus it would be important to teach teens how to prevent future negative consequences or
pathologies, influenced by negative events experienced or high stress perceived, according to their
personality traits.


Introducción
La adolescencia es una etapa en la que se experimentan cambios tanto a nivel físico, como social y
psicológico. Estos cambios provocan en los jóvenes niveles de estrés importantes (1, 2) y pueden
influir en el desarrollo de diferentes aspectos psicológicos y psicopatológicos (2, 3). Por ello, el
adolescente requiere poseer estrategias de afrontamiento eficaces que le permitan evaluar la
situación y los recursos de los que dispone y actuar de forma que logre adaptarse a las situaciones
que se van produciendo (3).
Los resultados de investigaciones acerca del estrés en adolescentes, destacan que el estrés es un
predictor de problemas internalizantes y externalizantes (4). Por ejemplo, experimentar conflictos
interpersonales estresantes aumentaría el riesgo de tener problemas de conducta (5). A su vez, una
variable fuertemente ligada al estrés y malestar, y que también se asociaría al desarrollo de
trastornos internalizantes y externalizantes (6-10), es experimentar sucesos vitales (SV) negativos en
la adolescencia. Así, un cambio de residencia, padres desempleados o con problemas legales o la
separación conyugal, son ejemplos de SV. Estas situaciones pueden además afectar a la estabilidad
emocional de los adolescentes, y pueden estar provocados por estrés familiar u otros hechos
específicos (11).


Por otra parte, la personalidad es un factor que puede influir en la frecuencia y el impacto derivado
de SV negativos, así como en la percepción de estrés. Este constructo psicológico se ha definido a lo
largo del tiempo por distintos autores y desde distintas perspectivas. Desde un enfoque
biodisposicional, la personalidad estaría formada por disposiciones (rasgos y dimensiones),
determinadas por variables genéticas y ambientales. Estas disposiciones predispondrían a actuar,
pensar y sentir de una forma relativamente estable y consistente (12). Actualmente, el modelo de
personalidad que más aceptación tiene en el entorno científico, es el modelo de los Cinco Factores
de personalidad (13, 14). Este modelo surge de la tradición psicoléxica y propone cinco dimensiones
básicas de personalidad: extraversión (E), neuroticismo (N), apertura a la experiencia (O),
amabilidad (A), y responsabilidad (R) (15).


Así, diferentes estudios transversales indican que la tendencia a experimentar más situaciones
conflictivas cada día se asociaría a variables de personalidad, como el afecto negativo o neuroticismo
(N) (16, 17, 18, 19). Asimismo, niveles altos en N y psicoticismo (P) (variable asociada a baja amabilidad,
A, y baja responsabilidad, C (20, 21)) y bajos en extraversión (E)(16), se asociarían a un mayor estrés
percibido. Y por último, el N y el P se vincularían a una mayor percepción de acontecimientos
estresantes y a mostrar mayor evitación como estrategia de afrontamiento (16).
Por otra parte, estudios prospectivos (10, 22, 23), que analizan las posibles relaciones entre N, SV
estresantes y depresión en adolescentes, indican que un alto N favorece la aparición de factores
estresantes, que explican la relación entre N y depresión. En la misma línea, el estudio de Breslau,
Davis y Andreski (24) muestra que el N predice la aparición posterior de SV estresantes cuando estos
eventos se definen y evalúan de forma objetiva. Asimismo, los resultados indican que la E actuaría
como un factor protector ante el estrés. Por ello, niveles altos de E favorecerían que al percibir un
suceso como estresante, se mostraran estilos de afrontamiento más eficaces centrados en el
problema y la emoción (9).


En conclusión, los resultados de investigaciones previas acerca de la relación entre personalidad y
SV indican que, una alta puntuación en E se relaciona con mayor número de SV positivos
experimentados, menor grado de afectación y mayor bienestar subjetivo; un alto N se asocia a
mayor exposición a SV estresantes, mayor afecto negativo y mayor riesgo de padecer depresión y
ansiedad; y que conforme aumenta el número de SV negativos aparecen más problemas de
conducta, dificultades de adaptación y depresión, y menos bienestar. Además, el psicoticismo,
caracterizado por una baja A y baja C, se asociaría a percibir más número de SV y mayor estrés.
Este estudio pretende clarificar cómo se asocian en la adolescencia las dimensiones de personalidad
del modelo de Cinco Factores, el nivel de estrés percibido y los SV experimentados. Las hipótesis
iniciales de las que se parte son: 1) un nivel de N elevado se asocia a mayor número de SV
experimentados, a mayor grado de afectación total y a mayor estrés percibido; 2) poseer baja A y
baja C se relaciona con mayor frecuencia de SV; 3) un alto nivel de E se asocia a menor grado de
afectación de los SV y menor estrés percibido; y 4) el estrés percibido aumentará conforme
aumente la frecuencia de SV experimentados y el grado de afectación total de estos SV.

Método
Muestra
La muestra estaba formada por 393 adolescentes, 224 chicas y 169 chicos, con edades
comprendidas entre los 14 y los 18 años. La edad media de la muestra fue de 15, 26 y su desviación
típica 0, 679.


Procedimiento
La evaluación se realizó en distintos centros de educación secundaria de la Comunidad Valenciana.
Los adolescentes participaban de forma voluntaria, tras firmar un documento de consentimiento
informado, en el que se informaba de la confidencialidad de los datos y de su uso exclusivo con fines
de investigación.
Un grupo de psicólogos experimentados administraron a los participantes distintos cuestionarios en
varias sesiones. Estas sesiones se iniciaban motivando a los adolescentes y asegurando la
confidencialidad del estudio.


Instrumentos
El instrumento utilizado para evaluar la personalidad fue la versión breve del cuestionario para
adolescentes JS NEO (25), el JS NEO-S, que analiza las cinco dimensiones del modelo de Costa y
McCrae (26, 27). Esta versión está formada por 150 ítems, con los que se evalúan 30 facetas, seis por
cada dimensión de personalidad. El sistema de respuesta empleado es una escala likert de 5 puntos
(1 = completamente en desacuerdo; 5 = completamente de acuerdo). La prueba presenta validez
de constructo y fiabilidad elevadas (25).
Para evaluar los sucesos vitales negativos experimentados, elaboramos un autoinforme de 41 ítems,
el CEVE, cuestionario de Eventos Vitales Estresantes. El CEVE recoge 41 sucesos presentes en cinco
escalas diferentes: ALCES (28) LES (29), LEQ (30), LTE (31) y LEC (32). Cada ítem corresponde a un
suceso vital negativo. El participante responde si ha experimentado el suceso vital en el último año.
En caso afirmativo, indica con una escala de 1 (nada) a 5 (extremadamente) el grado de afectación
sufrido por este evento. Concretamente en este estudio se analizan dos variables resultantes, el
número de sucesos vitales experimentados en el último año (que puede oscilar de 0 a 41) y el grado
de afectación total de estos sucesos, es decir, la suma de los niveles de afectación que el sujeto
informa de cada suceso vital experimentado.
Por último, el cuestionario PSS de Cohen (33, 34), está formado por 14 ítems y trata de medir el nivel
total de estrés percibido por cada adolescente. El participante responde si en el último mes, ha
experimentado distintas sensaciones y pensamientos según un sistema de respuesta tipo likert (0 =
nunca, 5 = muy a menudo). La medida de estrés total percibido puede oscilar de 0 a 56. Valores por
encima de 30 son indicadores fiables de estrés (34), de posibles problemas asociados a ansiedad o
depresión y revelan que el sujeto percibe su vida como impredecible, incontrolable o sobrecargada
(35)
.
Análisis
Para el análisis de datos se utilizó el programa SPSS Statistics 17. 0 con el que se realizan los
análisis descriptivos y de correlación. Además se utilizó el programa Amos Graphics 17. 0 para
realizar un análisis de vías y evaluar un modelo hipótetico mediante ecuaciones estructurales. En el
estudio se utilizaron los índices de ajuste: ji cuadrado (2)(36), ji cuadrado normada (2/gl)(37), el
Índice Subjetivo de Bondad de Ajuste (GFI)(38, 39), el Error de Aproximación Cuadrático (RMSEA)(40,
41)
, el Índice Tucker-Lewis (TLI)(42), el índice de Ajuste Normado (NFI)(42), el índice de Ajuste
Incremental (IFI)(43), y el Índice de Ajuste Comparado (CFI)(44); con los que se comprobó el nivel de
ajuste del modelo.

Resultados
A continuación, se presentan los resultados de los análisis realizados en el estudio. En la tabla 1,
aparecen los datos descriptivos de las principales variables.

tabla 1: datos descriptivos
N

E

O

A

R

Frecuen
cia de
SV

Afectaci
ón total

Estrés
percibi
do

61, 248

90, 804

66, 454

74, 136

83, 778

5, 281

3. 387

24, 349

Desviaci
13, 719
ón típica

11, 754

11, 064

10, 361

14, 510

3, 985

3. 937

6, 903

Media

Otros descriptivos a destacar son el valor mínimo de la frecuencia de SV experimentados que es 0, y
su valor máximo que corresponde a 21. El rango de valores entre los que oscila el grado de
afectación total es de 0 a 25. Finalmente, acerca del estrés percibido, el valor mínimo es 4, el valor
máximo es 47 y un 78 % de la muestra obtiene valores menores a 30 (punto de corte para
determinar posibles problemas de estrés).

La tabla 2, muestra las correlaciones existentes entre las distintas variables.
tabla 2: Correlaciones
N

Variables JS NEO Variables CEVE
E

O

A

R

Variables PSS

Frecuen
cia de
SV

Afectaci
ón total

N

1

E

, 148**

1

O

, 027

, 172**

1

A

, 172**

, 154**

, 331**

1

R

, 352**

, 063

, 130**

, 282**

1

Frecuenc
ia de SV

, 238**

, 144**

-, 027

, 146**

-, 123*

1

Afectació
n total

, 237**

, 128*

, 089

, 017

-, 041

, 485**

1

Estrés
percibido

, 592**

, 130**

, 001

-, 093

, 240**

, 305**

, 315**

Estrés
percibid
o

1

Las correlaciones más significativas y de mayor magnitud están resaltadas en cursiva y negrita.
* p < 0, 05
** p < 0, 01

Partiendo de las hipótesis iniciales del estudio, se realiza mediante ecuaciones estructurales un
modelo hipotético inicial, que no se ajustó a los datos. No obstante, según la prueba de kurtosis
multivariada este modelo era normal (6, 575). Reespecificamos el modelo según los Índices de
Modificación. El modelo modificado, denominado modelo final, sí se ajustó a los datos (Ver tabla 3).
Este modelo puede verse en la Figura 1.

tabla 3. Índices de ajuste del modelo final.
2

gl

P

2/gl

GFI

NFI

TLI

CFI

IFI

RMSEA

2. 97
2

2

. 226

1. 486

0. 998

0. 993

0. 981

0. 997

0. 998

0. 035

Figura 1: modelo hipotético final de las relaciones entre personalidad, frecuencia y grado total de
afectación de los SV y estrés percibido.
­. 17***
­. 15**

neuroticismo

. 15**

extraversión

. 24***

amabilidad

­. 14**

­. 09*
. 20***

. 15**
. 51***

frecuencia
de SV

. 11*

. 47***

afectación
total de SV

. 13**

. 14**

* p < 0. 05
** p < 0. 01
*** p < 0. 001

estrés
percibido


Discusión
El presente estudio tenía como objetivo principal comprobar si, en la adolescencia, existía relación
entre la personalidad, los sucesos vitales estresantes y el nivel de estrés percibido. Mediante un
análisis de ecuaciones estructurales se observa que las variables de personalidad, concretamente N,
E y A, predecirían el número de SV experimentados y el grado de afectación total de estos sucesos.
Además, N, E y la frecuencia y el grado de afectación de los SV predecirían, finalmente, el nivel de
estrés percibido.
Los análisis descriptivos de las variables de personalidad son consistentes con lo que se encuentra
en otros estudios que utilizan el JS NEO (45). Concretamente, nuestra muestra presenta medias más
elevadas en N, en E y en C, y más bajas en O y en A. Acerca de las desviaciones típicas, los valores
son muy similares. Respecto al número de SV experimentados, se observa una media en torno a 5 y
una desviación típica de 4. De este modo, la mayor parte de la muestra habría experimentado entre
1 y 9 SV. Acerca del grado de afectación, no aparecen altos niveles, en la línea de lo que se
encuentra en otras investigaciones (46, 47). Por último, acerca de las puntuaciones en estrés
percibido, se observa que un 78 % de la muestra obtiene valores menores a 30 (punto de corte),
por lo que aproximadamente 2 de cada 10 adolescentes de la muestra tendrían problemas de
estrés.
El análisis de correlación de datos muestra que aparecen correlaciones significativas entre las
variables estudiadas. Una mayor frecuencia de SV experimentados se asociaría a puntuaciones altas
en N y en E, y bajas puntuaciones en A y en menor medida en R. El grado de afectación total sería
mayor cuando aparece alto N, en menor grado alta E, y es mayor el número de SV experimentados.
Y por último, el nivel de estrés percibido presentaría correlaciones significativas con alto N, baja E,
baja R, alta frecuencia de SV y altos niveles de afectación.
El modelo final se ajusta a los datos. Con este modelo se logra explicar un 11% de la varianza de la
frecuencia de SV, un 26% de la varianza del grado de afectación total y un 40% de la varianza del
nivel total de estrés percibido.
De acuerdo con la hipótesis inicial, una persona con un alto nivel en N, experimentaría mayor
número de SV e informaría de mayor afectación de estos SV y mayor estrés percibido. Este
resultado replica lo que se ha obtenido en estudios anteriores (33, 48, 49). Así, una persona con altos
niveles en N, se caracteriza por ser ansiosa y depresiva, impulsiva, vulnerable, con baja tolerancia a
la frustración e inestable, lo que provocaría que informara de mayor número de SV experimentados
debido a que ante cualquier contratiempo, percibiría un suceso como más negativo. Además,
informaría de mayor estrés y afectación de estos sucesos, debido a su dificultad de manejar las
emociones, su inestabilidad y tendencia al malestar psicológico y a focalizar su atención en las
características negativas de las situaciones.
Respecto a la E, y de acuerdo con las hipótesis, esta dimensión se asociaría a un bajo grado de
afectación y de estrés percibido. Este resultado confirma lo encontrado en estudios anteriores (9, 11,
16)
. Así, una persona con puntuaciones altas en E, tiende a ser social, activa, optimista, y disfruta de
la diversión, la novedad y las amistades, por lo que ante un suceso negativo, percibiría más los
resultados y características positivas de la situación, y tener apoyo social favorecería, que percibiera
de forma menos negativa la situación y sentiría menor nivel de estrés.
La baja A, por su parte, se asociaría a experimentar más SV y menor grado de afectación total de
afectación de los SV. Los estudios previos con medidas de psicoticismo (asociado a la baja A)
obtienen resultados similares (16). Una persona con baja A, caracterizada por ser poco franca y poco
modesta, y por no mostrar confianza, sensibilidad o altruismo por los demás, tendría más
probabilidad de experimentar mayor número de SV. Así, sus rasgos más antisociales le incitarían a
tener más discusiones y verse envuelta en más situaciones problemáticas que podrían definirse
como SV controlables. Además, a estas personas experimentar estos sucesos les afectarían poco,
debido a su baja sensibilidad hacia los demás y baja franqueza, que les haría ver el suceso como
menos problemático o importante.
Acerca de la dimensión de Responsabilidad (C), los análisis de correlación indican que se asocia de
forma significativa con la frecuencia de SV y el nivel de estrés percibido, aunque esta variable de
personalidad se excluye del modelo debido a que no es relevante al relacionarla con los SV y el
estrés. Estos resultados podrían ser debidos a que, aunque pueda parecer que los adolescentes
menos responsables experimentarían mayor número de SV y menor grado de afectación, son los
participantes más antisociales los que experimentan más SV y expresan menor grado de afectación;
y los resultados significativos de la R se deben al porcentaje de varianza compartido con la
dimensión de A.
Por otra parte, un mayor número de SV experimentados provocaría mayor percepción de estrés y
mayor grado de afectación expresado por el sujeto. Así, cuando una persona percibe más nivel de
estrés, se debe en parte a que experimenta más SV y a que el grado total de afectación de estos
sucesos es mayor.
Como conclusión, los resultados de nuestro estudio indican que, en la adolescencia, la personalidad
influye en la ocurrencia de sucesos vitales y el grado de afectación de estos sucesos, así como en la
percepción de estrés. En esta etapa, la exposición a sucesos vitales negativos o alto estrés puede
ser determinante en el desarrollo de futuras patologías, como depresión (11, 50, 51, 52), problemas de
conducta o consumo de sustancias (11, 53). Así, nuestros resultados destacan la importancia de
enseñar a los adolescentes cómo manejar el estrés y hacer frente a sucesos vitales negativos para
prevenir posibles consecuencias negativas o patologías futuras, teniendo en cuenta cómo pueden
influir sus rasgos de personalidad en la percepción, exposición y afrontamiento de estas situaciones.


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