PUBLICIDAD-

La terapia desde una perspectiva compleja.

Autor/autores: Sergio Tobón
Fecha Publicación: 01/01/2004
Área temática: Tratamientos .
Tipo de trabajo:  Conferencia

RESUMEN

OBJETIVOS:(1) Analizar la evolución histórica del pensamiento sistémico y articular desde éste el pensamiento complejo; (2) Describir una perspectiva general para abordar los problemas psicológicos, psicosociales y psicopatológicos desde el pensamiento complejo y la teoría del caos; (3) Establecer algunos lineamiento generales para abordar la terapia clínica (psicológica, psiquiátrica y de familia) desde la complejidad.

CONTENIDOS: (1) La ponencia comienza con una descripción general de la teoría General de Sistemas, la cibernética y la ecología, para luego analizar en detalle la propuesta del pensamiento complejo; (2) teniendo como base lo anterior, se analiza de manera crítica y reflexiva la conceptualización tradicional de terapia en salud mental y se anotan vacíos y problemas; (3) se formulan una serie de lineamientos para comprender los problemas de salud mental teniendo en cuenta el tejido de relaciones, los principios del pensamiento complejo y la incertidumbre; (4) finalmente, se plantean algunas pautas para orientar la terapia en salud mental de una manera flexible, autorreflexiva, crítica, contextualizada y transdisciplinaria.

Palabras clave: Complejidad, Salud mental, Teoría de sistemas, Terapia familiar, Transdisciplinariedad


VOLVER AL INDICE

Url corta de esta página: http://psiqu.com/1-2494

Contenido completo: Texto generado a partir de PDf original o archivos en html procedentes de compilaciones, puede contener errores de maquetación/interlineado, y omitir imágenes/tablas.

La terapia desde una perspectiva compleja.

Sergio Tobón; José L. Fernández.

* Docente universitario. Investigador en psicología clínica y psicoterapia Asesor de programas de salud mental en Colombia

** Asesor de programas de salud mental
Investigador en psicología clínica y psicoterapia en Colombia

PALABRAS CLAVE: terapia familiar, Complejidad, teoría de sistemas, Transdisciplinariedad, Salud mental.

 

Resumen

OBJETIVOS:(1) Analizar la evolución histórica del pensamiento sistémico y articular desde éste el pensamiento complejo; (2) Describir una perspectiva general para abordar los problemas psicológicos, psicosociales y psicopatológicos desde el pensamiento complejo y la teoría del caos; (3) Establecer algunos lineamiento generales para abordar la terapia clínica (psicológica, psiquiátrica y de familia) desde la complejidad.

CONTENIDOS: (1) La ponencia comienza con una descripción general de la teoría General de Sistemas, la cibernética y la ecología, para luego analizar en detalle la propuesta del pensamiento complejo; (2) teniendo como base lo anterior, se analiza de manera crítica y reflexiva la conceptualización tradicional de terapia en salud mental y se anotan vacíos y problemas; (3) se formulan una serie de lineamientos para comprender los problemas de salud mental teniendo en cuenta el tejido de relaciones, los principios del pensamiento complejo y la incertidumbre; (4) finalmente, se plantean algunas pautas para orientar la terapia en salud mental de una manera flexible, autorreflexiva, crítica, contextualizada y transdisciplinaria.



Introducción

El desarrollo y consolidación del pensamiento complejo en las disciplinas sociales y humanas permite nuevas perspectivas para abordar varias cuestiones que por años han permanecido problemáticas en la terapia familiar tales como: (1) La dificultad para comprender el concepto de bienestar e integrar dicho concepto en la terapia familiar; (2) La organización de la familia con base en el orden y los procesos de caos; (3) La incorporación en la terapia de las estrategias y prácticas que implementan las formas de forma cotidiana para resolver los problemas y mejorar su calidad de vida, junto con todo un conjunto de técnicas y procedimientos creados en la tradición académica en cada uno de los enfoques.

Estos puntos son los que se abordan en el presente documento, teniendo como base la referencia general el enfoque sistémico. Los autores proponen el término de terapia familiar compleja para dar cuenta de los aportes de la complejidad al entendimiento e intervención familiar, integrando la línea teórica y metodológica basada en la teoría General de Sistemas. Esto se concretiza en la formulación de siete saberes que recogen un cúmulo de conocimientos y experiencias que las familias generalmente utilizan para abordar por sí mismas los problemas y autoconstruirse permanentemente. Además, se aborda la cuestión de cómo establecer las bases para una integración de las diferentes perspectivas de terapia familiar dentro de un marco transdiciplinario, teniendo como base el pensamiento complejo, el cual brinda un conjunto de claves para abordar este reto.


La terapia familiar en salud mental desde la teoría general de sistemas, la cibernética y la comunicación humana

Aportes sistémicos

De acuerdo a la teoría General de Sistemas1, podemos definir un sistema como un conjunto de elementos interrelacionados de manera dinámica, donde los distintos elementos se influyen de forma recíproca. Cuando un miembro cambia, los demás miembros también se ven afectados ya que todos están interconectados mediante pautas de interacción, las cuales no son reducibles a la suma de los elementos que constituyen el sistema2.

La familia como sistema tiene tres características:

-Totalidad: la familia como sistema es superior a la suma de sus miembros.

-Circularidad: Las interacciones entre los miembros no son lineales sino circulares, es decir, se influyen de forma recíproca.

-Equifinalidad: Los cambios de la familia pueden deberse a distintas causas.

 

Aportes cibernéticos

Feedback: Los miembros de la familia se brindan información de manera recíproca, lo cual influye en sus relaciones. Esta información puede ser explícita o implícita.

Homeostasis: El sistema familiar se mantiene en equilibrio mediante retroalimentación negativa. Por ejemplo, un problema escolar de un hijo puede detener un conflicto en los padres, volcando la atención de éstos últimos.

Morfogénesis: proceso mediante el cual la retroalimentación positiva influye cambios en la organización familiar. Por ejemplo, un hijo obtiene un triunfo en un deporte y esto hace que la familia se cohesione más y disminuya su distanciamiento.

Aportes comunicacionales

Una serie de investigadores ha construido un conjunto de aportes comunicacionales para entender la familia3.

La familia como sistema siempre está comunicando tanto hacia otros sistemas como al interior de sus subsistemas mediante el comportamiento, el cual es mensaje para la misma persona que lo emite y para las demás personas.

En toda comunicación familiar es posible distinguir dos niveles: contenido (nivel digital referido al significado en sí de la comunicación) y relacionales (nivel analógico referido al tipo de relación entre emisor y receptor). Por ejemplo, la frase “Estudia ahora mismo” tiene como contenido una orden de la madre a su hija para que estudie, mientras que en el nivel analógico lo que hay es un vínculo de autoridad entre el emisor (la madre) y el receptor (la hija).

Aportes estructurales

La familia como sistema está separa del mundo exterior mediante límites o fronteras y en su estructura posee subsistemas que también tienen límites de diferentes grados y formas de jerarquía entre ellos4. Los límites tienen como función proteger la diferenciación del sistema y permitir la relación entre sus miembros. Algunos de los subsistemas son: Parental (relación entre los padres), conyugal (relación de pareja) y filial (relación de los hijos). Los límites son establecidos por reglas implícitas o explícitas al interior de la misma familia. Los límites pueden ser difusos, rígidos o claros.


La familia desde el pensamiento complejo. Nuevas perspectivas frente a la teoría General de Sistemas y al enfoque cibernético

Inicialmente, a mediados de la década de los 50 se desarrolló la teoría General de Sistemas, la cual brindó un referente para comprender la organización dinámica de la familia, posibilitando comprenderla como un sistema de múltiples dimensiones interdependientes. Múltiples avances y comprensiones de la familia ha posibilitado la TGS, sin embargo, con el tiempo ha encasillado el proceso de intervención y se ha vuelto muy restrictiva. Poco a poco el enfoque de la teoría General de Sistemas que ha sido predominante, se ha comenzado a relativizar debido a que han comenzado a surgir nuevas referencias epistemológicas en quienes han tenido un enfoque sistémico, tales como el constructivismo social5. Además del constructivismo social y el enfoque narrativo, el pensamiento complejo es nuevo punto de mira para redimencionalizar la intervención familiar, lo cual se convierte en un estímulo para continuar construyendo teóricamente. Esto no implica dejar de lado el enfoque sistémico, sino abrirlo a nuevas perspectivas trascendiendo las posturas altamente pragmáticas que se generan en este enfoque.

El pensamiento complejo complementa la epistemología sistémica posibilitando un método de construcción de saberes donde se tiene en cuenta el entretejido de relaciones, el caos, el cambio y la incertidumbre6. El pensamiento complejo tiene sus fundamentos en las distintas tradiciones epistemológicas: el positivismo y la fenomenología, así como en nuevas perspectivas tales como el pensamiento sistémico, la investigación holística y descubrimientos científicos en la física y la biología tales como procesos de incertidumbre, irreversibilidad, caos en los sistemas e impredecibilidad de fenómenos.

Definición de pensamiento complejo

El pensamiento complejo constituye un método de construcción del saber humano desde un punto de vista hermenéutico, o sea interpretativo y comprensivo, retomando la explicación, la cuantificación y la objetivación. Es un método en cuanto camino que no está hecho ni trazado, sino que se hace caminando, como el poema de Machado7: “Caminante, son tus huellas el camino y nada más. . . ”. El pensamiento complejo consiste en una nueva racionalidad en el abordaje del mundo y del ser humano, donde se entretejen las partes y elementos para comprender los procesos en su interrelación, recursividad, organización, diferencia, oposición, y complementación, dentro de factores de orden y de incertidumbre.
Así lo expresa Morín:

. . . Complexus significa lo que está tejido en conjunto; en efecto, hay complejidad cuando son inseparables los elementos diferentes que constituyen un todo (como el económico, el político, el sociológico, el psicológico, el afectivo, el mitológico) y que tienen un tejido interdependiente, interactivo e inter - retroactivo entre el objeto de conocimiento y su contexto, las partes y el todo, el todo y las partes, las partes entre sí, la complejidad es, de hecho, la unión entre la unidad y la multiplicidad. . .

La realidad se da en un proceso de constante cambio donde interactúan procesos de orden y de incertidumbre. Esto exige al ser humano el desarrollo de estrategias que le posibiliten afrontarla de forma dinámica. La construcción del conocimiento se da desde el sujeto en una continua reflexividad con la realidad. Al respecto, es importante aclarar que el pensamiento complejo no rechaza la certeza en beneficio de la incertidumbre, la separación en beneficio de la inseparabilidad, ni la lógica para autorizarse todas las transgresiones. Antes por el contrario, esta epistemología consiste en hacer una ida y vuelta constante entre certezas e incertidumbres, entre lo elemental y lo global, entre lo separable y lo inseparable. El . . . pensamiento complejo es ante todo un pensamiento que relaciona. . . 9. No se trata de abandonar los principios de la ciencia clásica - orden, separabilidad, lógica- sino de integrarlos en un esquema que es al mismo tiempo más amplio y más rico. No se trata de oponer un holismo global y vacío a un reduccionismo sistemático, se trata de incorporar lo concreto de las partes a la totalidad. Hay que articular los principios de orden y de desorden, de separación y de unión, de autonomía y de dependencia, que son al mismo tiempo complementarios, competidores y antagonistas, en el seno del universo.

La familia es un espacio por excelencia de formación de todos sus miembros, y todo proceso de intervención familiar tiene como principio una propuesta formativa. Sin embargo, la formación ha tendido a asumirse desde una perspectiva rígida, fragmentada y descontextualizada del proceso de plenitud de cada persona y de la misma familia como tal, sin tener en cuenta las múltiples interdependencias con el tejido socioeconómico.

Las ciencias sociales y humanas han contribuido a crear procesos rígidos e inflexibles sobre la formación, en tanto se basan en la construcción de teorías sobre el sujeto reduccionistas e irreconciliables entre sí, tomando como referencia de una forma explícita o implícita el paradigma clásico positivista10. En el fondo, lo anterior es explicable por los las siguientes consideraciones:

1. A pesar de que prima la intencionalidad de abordar la formación humana de manera integral, en la práctica esto no ocurre así y ello es explicable por que no las personas que la abordan carecen como tal de un modo de pensar complejo.


2. Muchas veces se tiene la pretensión de tener en cuenta varias perspectivas para comprender la formación humana, pero estas son de tipo multidisciplinario y ocasionalmente interdisciplinario, no transdiciplinario.

3. Ha faltado un enfoque que aborde su complejidad, tal como lo plantea Luzuriaga cuando afirma que “la formación del ser humano es un proceso complejo que representa un desafío para las concepciones epistemológicas tradicionales”11.

Es por ello, que desde el pensamiento complejo hay nuevas bases para pensar, abordar y elaborar lo que es la formación humana en la familia. Este es el propósito del Enfoque Socioformativo Complejo12, donde se busca partir de los saberes populares y que poseen las mismas familias para comprender cómo se da la formación humana, teniendo en cuenta la cultura, la sociedad, la economía y la política, junto con los saberes académicos.

Concepto de familia desde la complejidad

Vamos a exponer cómo se entiende la familia desde la complejidad, abordando los tres principios del pensamiento complejo. Características de la familia, de acuerdo al pensamiento complejo:

-Un tejido compuesto por procesos interrelacionados

-Relaciones en continua auto-eco-feno-geno-organización

-Tejido social, económico y político

-Dinámica de cambio y transformación

-Mediadora de recursos para afrontar la incertidumbre y el caos en las diversas construcciones vinculares entre sí, con otras familias, la sociedad y el ambiente


De acuerdo con Morin13, el pensamiento complejo se fundamenta en tres principios: principio de la recursividad organizacional, principio dialógico y principio hologramático.

Principio de la recursividad organizacional

Hace referencia a la unión de nociones antagónicas en continua interacción.
La familia es un tejido de múltiples relaciones antagónicas entre sus miembros y el entorno, las cuales, en la medida que se complementen contribuyen a que el tejido pueda fluir y de esta forma generar las condiciones de la plenitud individual y familiar.

Por ejemplo, en toda familia hay un antagonismo entre los procesos de dependencia e independencia, tanto al interior de las relaciones entre sus miembros como con respecto al tejido socioambiental. En la medida que se logre una unión de ambos, complementándose, se crearán las condiciones para vivir situaciones de grandes satisfacciones en la familia, facilitando la formación y el crecimiento de quienes la integran, así como de la misma sociedad.

Sin embargo, con frecuencia esto no sucede así y aquí radica la causa de muchos problemas con los cuales las familias llegan a terapia: no han podio resolver el conflicto de la autonomía y de la dependencia. Unas veces, el asunto se resuelve a favor de uno de los dos. Por ejemplo, la madre crea una relación de dependencia con su hijo que le impide a éste generar un proceso de flujo desde su interior para satisfacer sus necesidades y deseos de crecimiento, desarrollo y construcción de sentido para su vida. En otra dimensión, también tendemos a hallar a muchas familias que frente a la dependencia –autonomía de la sociedad, optan por aislarse y construirse una coraza protectora contra la entrada de otras personas o familias.

La plenitud en la familia sólo es posible ser pensada, por ende, desde la complementariedad entre la dependencia y la autonomía. “. . Necesitamos una dependencia del ambiente exterior para construir y reconstruir nuestra autonomía”14. Esto mismo ocurre con muchos otros procesos antagónicos que se viven en la familia, los cuales es necesario, acorde al pensamiento complejo, complementar, tales como el afecto – autoridad, amor –odio, pareja-hijos, etc.

Principio dialógico

Este principio permea las diferentes construcciones en la teoría compleja. Plantea que los efectos son ellos mismos productores de aquello que los produce, lo cual es la base de auto-eco-fe-geno-organización. La familia es un tejido dado por relaciones dialógicas entre sus miembros y con el entorno socioambiental. El flujo de plenitud familiar se establece cuando se asume la dialogicidad, no como algo inevitable sino deseable. Por ejemplo, la sociedad15 produce a las familias y un ejemplo de ello es que tras cambios sociales se observa cómo el entretejido familiar cambia. Pero a su vez, la familia también genera cambios en la sociedad y por consiguiente es también causa de ella.

Principio hologramático

De acuerdo a este principio, en los sistemas la parte está en el todo y a la vez el todo está en cada una de las partes. Por ejemplo, en la familia es tejido (todo) compuesto por relaciones entre sus miembros (partes), pero a su vez, todo miembro lleva la estructura de la familia en su personalidad, donde hay influencia de los padres, hermanos, hermanas, otros familiares, etc. El flujo en tejido hacia la plenitud se logra cuando la familia y cada uno de sus miembros asumen esta relación hologramática, lo cual conduce a tomar mayor responsabilidad en las relaciones que se establecen.

 

La familia es un tejido transdisciplinario

Tanto la construcción teórica sobre la familia como la intervención familiar han tendido a darse desde la unidisciplinariedad (el objeto se aborda desde una sola perspectiva). También se ha avanzado en la pluridisciplinariedad (el abordaje de la familia desde varias disciplinas a la vez). En algunos casos se ha avanzado en la interdisciplinariedad (ésta, a diferencia de la pluridisciplinariedad, constituye una transferencia de métodos de una disciplina a otra).


Desde el aporte influyente de GUSDORF16 en 1977, se ha avanzado sobre la comprensión de la transdisciplinariedad como una perspectiva que trasciende las disciplinas, diferente al enfoque interdisciplinario17. La primera es un encuentro y cooperación entre dos o más disciplinas, aportándose de forma mutua sus propios esquemas conceptuales y los métodos de investigación.

La transdisciplinariedad, en cambio, se da en el marco de la organización de varias disciplinas en torno a un único paradigma teórico18. La comprensión de cualquier fenómeno humano requiere de la integración de las múltiples relaciones entre partes, fenómenos y procesos. La transdisciplinariedad organiza el conocimiento en un nuevo nivel epistemológico que trasciende la conjunción de conocimientos e integra saberes tanto académicos como populares como los míticos y los religiosos19. El pensamiento complejo es actualmente el marco central para abordar la transdiciplineriedad en la familia por que brinda las claves para construir los conocimientos entretejiéndolos mediante el intercambio y la cooperación. Esto implica establecer esquemas cognitivos que atraviesen las disciplinas20.

Cambio, orden e incertidumbre en la familia

La característica a todos los procesos es el cambio y, de acuerdo a la teoría de la complejidad, éste es el factor que moviliza la continua organización mediante la interrelación de elementos de orden y de desorden (caos e incertidumbre). La familia es un tejido en continua auto-eco-feno-geno-re-organización21: Esto quiere decir, que a su interior hay procesos vitales que movidos por dinámicas internas que llevan a su autoorganización, emergiendo de esta forma cualidades que no es posible encontrar en los miembros tomados de forma aislada.

La familia es necesario asumirla como un tejido en continuo cambio que se construye momento a momento, dado por procesos de orden – desorden- interacciones- organización donde intervienen todo un conjunto de subsistemas interrelacionados. Por ende, familia implica incertidumbre, cambio, transformación, desorden e inestabilidad. No todo puede ser controlable ni predecible y esto debe ser tenido en cuenta en la estructuración de cualquier proceso de intervención. Ella se da en una continua interdependencia de factores personales, sociales, económicos, institucionales y familiares.

 

Comprender las Vicisitudes de la familia en los procesos de intervención

La familia es un sistema complejo22. Es desde allí donde es necesario entender las vicisitudes de la familia actual, en esta complejidad inherente a su naturaleza. La familia contemporanea está atravesando trascendentales cambios y los profesionales que intervienen en ella necesitan aprender a reconocerlos en el marco de los procesos de mundialización y creación, a la vez, de identidades locales. Ante esto, se requiere una nueva visión: la de la familia como un tejido que afronta vicisitudes para la cual es esencial un acercamiento no reduccionista tanto en la terapia como en los demás procesos de intervención.

El siglo XXI trae considerables retos de cambio para la familia, por lo cual es necesario asumir en ésta las siguientes perspectivas:

-La familia es necesario que comprenda el proceso de mundialización y la manera cómo éste la afecta, con una actitud proactiva de contribuir conscientemente a general una Tierra Patria donde sea posible convivir en la diferencia.

-La familia tiene el reto de contribuir a construir identidad sociocultural. Frente a las fuertes tendencias de globalización, la familia requiere construir un sentido crítico frente a ellas y ser espacio de formación de valores para valorar la cultura y sociedad cultural, motivando a su continuidad y preservación, incorporando todos aquellos aportes positivos de otras culturales y sociedades.

La Familia es histórica y es el motor del devenir del hombre, por lo que requiere que sea consciente de las transformaciones que ha tenido.

-La familia es multidimencional y por lo tanto ninguna área del conocimiento tiene por sí sola la facultad de comprender su complejidad, requiriéndose de diferentes perspectivas.


La terapia desde una perspectiva compleja

Definición

La terapia asumida desde una perspectiva compleja es un enfoque que tiene como horizonte la transdiciplinariedad, para lo cual se retoman los diversos enfoques sistémicos así como otros enfoques no sistémicos, no de manera ecléctica, sino con base en problemas. Por lo tanto, no es una nueva forma de terapia familiar, sino una manera de abordar la terapia recogiendo diferentes aportes, partiendo de los saberes familiares.

En terapia familiar, las elaboraciones conceptuales son herramientas que se construyen con el fin de tener elementos para comprender y orientar la intervención con las familias. Son, por lo tanto una interpretación de la realidad y en ningún caso la realidad en sí. Creer que la propia visión de la realidad es la realidad misma, es una ilusión peligrosa"23, 24. Por lo tanto, la teoría no se construye de una vez para siempre, sino que está en una continua reevaluación, construcción y deconstrucción.

 




La mente compleja

Desde una perspectiva compleja la mente no está en el cerebro ni es producto del sistema nervioso central contenida en una persona. Es un tejido de relaciones y vínculos que conforman una organización capaz de dirigir otras organizaciones de manera autónoma. Por lo tanto es individual, pero a la vez es social y ecológica. Por ejemplo, escribir implica coger el lápiz y realizar una serie de trazados en una superficie, donde el primer trazo determina cómo será el segundo, y segundo trazo el tercero, y así sucesivamente, dando una continua corrección. La mente aquí no es el pensamiento que planea, guía y evalúa, sino no todo el sistema: lápiz, ojos, cerebro-manos-papel-intenciones-trazados. En un grupo, la mente no es individual sino que es un entretejido de relaciones entre los miembros.


Tres fases de la terapia breve desde una perspectiva compleja

FASE DE ENCUADRE

Como en toda terapia, se empieza estableciendo contacto con la familia. Se presenta el terapeuta y se solicita a su vez que la familia se presente. Se define con la familia: Lugar, frecuencias, duración de las citas y numero de estas, manejo de incidencias(retrasos, citas perdidas, urgencias, citas extras), normas del paciente(tareas para la casa. . ), normas del terapeuta(directividad, respuestas a preguntas, consejos. . )

FASE DE PLANEACIÓN

Detectar el problema

Identificar cuál es el motivo de consulta que presenta la familia y a partir de éste determinar el problema a resolver a resolver, buscando el mayor grado de consenso posible. Al respecto se recomienda lo siguiente:

1. El problema debe ser urgente
2. Es necesario que frente a él haya el suficiente consenso
3. Debe presentar unas dimensiones que hagan posible su resolución en el marco de diez sesiones como máximo.

Valorar los Siete Saberes

Determinar cómo está la familia en la práctica de los siete saberes esenciales para vivir plenamente, ya que esto brinda un indicador para comprender el entretejido de relaciones entre los miembros. Al respecto, se ha construido una escala breve para realizar esta labor que tiene como base una metodología tanto cualitativa como cuantitativa.

Determinar metas

Luego, se continua con la construcción participativa de una o varias específicas que expresen la resolución como tal del problema. En esta fase es recomendable generar en la familia una actitud optimista frente a la resolución de dicho problema.

Construcción de un plan para alcanzar esas metas

Una vez se tiene esto, se pasa a plantear un camino para resolver el problema. A este respecto, se sugiere partir de las estrategias que la familia ya ha implementado para resolver el problema y determinar los factores que han obstaculizado su éxito. A partir de ello, se procede a construir una nueva solución con el aporte de todos buscando no repetir las estrategias que no han dado resultado o introduciendo en ellas modificaciones para potencializar su eficacia. En tanto se pretende tejer un proceso de relaciones familiares, el proceso de intervención comienza por definir cómo sería el tejido familiar con el problema resuelto. Para ello se les pregunta: ¿Cómo será las vida de Usted o Ustedes sin el problema? ¿Cómo cambiarán las cosas con respecto a la actualidad cuando el problema se haya solucionado?

Tal manera manera de proceder que aquí se propone permite que se logre en la familia un sueño colectivo que genere motivación hacia la resolución del problema en todos los miembros o en aquel o aquellos con los cuales se realiza la intervención. Por ende, a diferencia de algunas perspectivas tradicionales que se detienen en analizar minuciosamente cómo se da el problema, qué lo produce, cuáles son sus efectos, cuáles son sus subproblemas, qué lo caracteriza, etc, lo que se pretende desde un enfoque dirigido a la construcción del tejido familiar es enfatizar, no en el problema, sino en imaginar cómo sería el tejido de relaciones con la solución del problema.

Enfatizar en la solución y no en el problema en sí tiene una serie de beneficios tales como:

1. Le permite a los miembros de la familia comenzar a construir el tejido de relaciones familias que desean desde el primer momento, visualizando cómo sería éste si el problema se resolviese.
2. Genera en las personas una actitud de trabajar proactivamente, ayudándoles a reconocer que tienen un problema, pero también a trascender toda actitud negativa que haya con respecto a su resolución.
3. Motivación a trabajar en la construcción del nuevo tejido dado que hay una mayor comprensión de las ventajas de la resolución del problema.

Orientar las conversaciones hacia lo que funciona producen los siguientes
Efectos, lo cual ya tiene una larga tradición 25, 26:

1. Acorta la duración de las diferentes sesiones y del proceso de intervención como tal
2. Le otorga a la familia la dirección del proceso, colocándose el terapeuta en una posición de facilitador

Hacia una solución efectiva

Cuando se está ante una situación conflictiva recurrente o que se prolonga en el tiempo de manera indefinida, lo que hay que hacer es dejar de aplicar la solución infructuosamente intentada y probar a hacer algo diferente. Dicho de una manera sencilla: “si lo que haces no funciona, prueba otra cosa”. Por ende, podemos decir que resolver un problema es cambiar la manera cómo lo afrontamos; es introducir siempre un nuevo elemento. Aveces los cambios vienen de forma espontánea, pero lo general es que hay que provocarlos intencionalmente o si no siempre vamos a tener la situación conflictiva a nuestro lado.

Aplicar estrategias exitosas del pasado

Muchas veces para resolver un problema no es necesario pensar en ingeniosas soluciones; basta mirar en nuestra historia personal y de seguro que podemos encontrar estrategias que nos fueron de mucha utilidad para abordar situaciones difíciles muy similares a las del presente. Por lo tanto, la tarea es ajustarlas a adversidad actual y aplicarlas.


Meta de cambio mínimo

El paso siguiente para resolver un problema consiste en establecer una meta pequeña y fácilmente alcanzable. Esto hace que la mente se enfoque en el pequeño cambio que hay que dar en el corto tiempo y que no se diluya pensando en una gran meta futura. En muchos casos se constata como un pequeño cambio dado de manera certera y en el momento preciso ayuda a producir otros cambios hasta que el impacto sobre el problema se magnifica y se obtiene una solución significativa. Por ejemplo, una pareja nos contó que vivió un proceso de separación, y, como primera meta de cambio mínimo, se propusieron escucharse mutuamente. Una vez lo lograron, comenzaron a planear otra meta como era aceptar el hecho de la separación. Apenas lograron ésto, pasaron a proponerse como meta llegar a un acuerdo sobre la relación con la hija (una niña de 4 años). De aquí pasaron a proponerse otras metas y así sucesivamente, hasta que alcanzaron un proceso de separación positivo y constructivo para ambos.

No forzar lo natural

Cuando la solución a un problema viene únicamente de manera espontanea, no se puede pretender resolverlo forzando la solución. En estos casos lo único aconsejable es “empeñarse en lograr aquello que se desea conseguir”. Por ejemplo, si un miembro de la pareja tiene insomnio, la meta no puede ser proponerse dormir (algo natural), sino empeñarse en no dormir (algo diferente), lo cual hace que se desestrese y efectivamente le llegue el sueño. En cambio, si se afana en dormir, se pone ansioso y más dura en conseguir el sueño. Esto mismo puede aplicarse a muchos problemas de la vida familiar. Por ejemplo, si el problema es que el hijo no quiere estudiar en la casa, la meta no puede ser que estudie. El estudio en tanto proceso de aprendizaje ocurre de manera natural cuando se tiene la motivación para ello y los recursos necesarias. Por lo tanto, la meta es debe ser relacionada con establecer dichas condiciones.

Orientar la construcción y fortalecimiento de saberes esenciales para la convivencia

Nosotros hemos sistematizado dicha sabiduría interna para que sea más fácilmente comprensible por cada familia y se pueda emplear mejor, a través de la descripción de siete saberes, los cuales encontrarás en cada uno de los capítulos de este libro:

1. Saber del liderazgo: Consiste en construir objetivos claros que guíen a la familia, y, a la vez, generar un espíritu de trabajo en equipo que posibilite llegar allí.

2. Saber del contacto: Es el establecimiento de vínculos positivos y constructivos entre los miembros de la familia; y entre éstos y otras personas de la sociedad, mediante el respeto y la confianza.

3. Saber de la autorreflexión: Se define como un diálogo con nuestro ser, en voz baja o en voz alta, para comprender la vida, planearla y resolver los problemas.

4. Saber del diálogo: Es la comunicación con otros basada en la comprensión y la búsqueda de acuerdos mínimos.

5. Saber de la autorrealización: Consiste en detectar las necesidades de crecimiento, construir metas y luchar por alcanzarlas, con apoyo de la familia.

6. Saber del emprendimiento: Es detectar oportunidades económicas, sociales, recreativas, etc. e iniciar proyectos que contribuyan al desarrollo personal, familiar y social.

7. Saber de la común-unión: Es la construcción de la unidad familiar, social y planetaria, mediante la vivencia de la solidaridad. Por medio de este saber nos asumimos como seres autónomos pero también como seres que hacemos parte de un todo que nos trasciende.


Fase de ejecución

Crear las condiciones para que se de la plenitud familiar

Facilitar en la familia la reconstrucción del tejido de su realidad. Esto es muy cercano a lo que propone el constructivismo 27, 28, 29. El sufrimiento se genera por una deformada construcción de vínculos entre nuestra consciencia y ésta con los demás y el mundo. En toda crisis el énfasis tiende a darse en lo problemático. El cambio comienza cuando se comienza a abordar lo positivo que hay tras ellas, buscándose reestablecer el flujo del tejido.


Bibliografía

Acosta, Ramón Elías; Fernández, José Leonidas y Tobón, Sergio. Efectos de la meditación trascendental en la salud general de las mujeres con cáncer de mama. Investigación presentada en el I Encuentro de Semilleros de Investigación. Medellín, 2001.

Bateson, G. Steps to an ecology of mind. New York: Ballantine, 1972.

BLANCO VELASCO, B. ; ESPINA BARRIO, J. A. , «La importancia del contexto en la psicosis infantil. Yo Ramón soy un esquizofrénico», Familia-Revista de Ciencias y orientación Familiar, 1994, 8, pp. 97-108.

Boscolo, L, Cecchin, G, Hoffman, L, Penn, P. terapia Familiar Sistémica de Milán. Diálogos sobre teoría y práctica. Buenos Aires: Amorrortu Editores, 1987.

Botella, L. Personal construct psychology, constructivism, and postmodern thought. In R. A. Neimeyer & G. J. Neimeyer (Eds. ), Advances in Personal Construct Psychology (Vol. 3). Greenwich, CN: JAI Press, 1995.

BOTTOMORE, T. Introduction. En APOSTEL y otros, Interdisciplinarité et sciences humaines, Paris, UNESCO, 1982. Trad. esp. : Interdisciplinariedad y ciencias humanas, Madrid, Tecnos/Unesco, 1983.

ROZO GAUTA, José. El sujeto en las ciencias sociales. En: MALDONADO, Carlos. Visiones sobre la complejidad. Santa Fé de Bogotá: Ediciones El Bosque, 1999

COMITÉ INTERINSTITUCIONAL DE FAMILIA. Carta de la Transdisciplinariedad. En: El pensamiento complejo y la familia, II Congreso Latinoamericano de Familia Siglo XXI. Medellín, 1998, pp. 17

ESPINA BARRIO, J. A. , «¿Cómo sabemos lo que creemos saber?», Boletín de la Asociación Castellano-Leonesa de Salud Mental, 1993, 2, pp. 11-16.

ESPINA BARRIO, J. A. ; BLANCO VELASCO, B. , «La revisión en un programa de terapia familiar en un centro de salud mental», VÍNCULOS. Revista de psicodrama, terapia Familiar y otras Técnicas Grupales, 1992, 4, pp. 67-80.

Feixas, G. , y Miró, M. T. Aproximaciones a la psicoterapia: Una introducción a los tratamientos psicológicos. Barcelona: Paidós, 1993.

Fernández Liria, A. ; Hernández Monsalve, M. ; Rodríguezs Vega; B. , Benito Cano, t; Mas Hesse, J. teoría y practica de la psicoterapia en la atención pública a la salud mental: resultados de un grupo de consenso. En Fernández Liria, A. ; Hernández Monsalve, M; Rodríguez Vega; B. (coords). Psicoterapias en el sector público: un marco para la integración: Madrid: AEN 1997. 143-162

Fernández, José Leonidas. La evaluación por competencias. En: Revista Educación y cultura. Separata Especial. Medellín: Universidad de Antioquia, 2002.

GUSDORF, G. Passé, présent, avenir de la recherche interdisciplinaire. Rev. Int. Sci. Soc. , 1977, XXIX (4), pp. 627-648.

Haley, J. Uncommon therapy. New York: Norton, 1981.

INGLOTT, Rafael. La cuestión de la transdisciplinariedad en los equipos de salud mental. Rev. Asoc. Esp. Neuropsiq. , 1999, vol. XIX, n. º 70, pp. 209-223. .

Keeney, B. P. , & Ross, J. Mind in therapy: Constructing systemic family therapies. New York: Basic Books, 1985, p. 24.

Lazarus, R. S. y Folkman, S. estrés y procesos cognitivos. Barcelona: Martínez Roca, 1986 (Or. 1984).

LIZÁRRAGA BERNAL, Alfonso. Formación humana y construcción social: una visión desde la epistemología crítica. En: Revista de Tecnología Educativa. Vol. XIII, no. 2 (1998), p. 156.

MACHADO, Antonio. Caminante, no hay camino. . . Santafé de Bogota: Planeta, 1998, p. 19.

Mahoney, M. J. The modern psychotherapy and the future of psychotherapy. En Bogar B, Beutler, LE (eds. ). Comprehensive textbook of psychotherapy. New York: Oxford University Press1995, 474-489.

Mahoney, M. J. The modern psychotherapy and the future of psychotherapy. En Bogar B, Beutler, LE (eds. ). Comprehensive textbook of psychotherapy. New York: Oxford University Press1995, 474-489.

Mahoney, M. J. The modern psychotherapy and the future of psychotherapy. En Bogar B, Beutler. LE (eds. ). Comprehensive textbook of psychotherapy. New York: Oxford University Press1995, 474-489.

MATURANA, H. ; VARELA, F. ; BEHNCKE, C. , Las Bases Biológicas del Entendimiento humano. El árbol del conocimiento. Al pie del árbol, Santiago de Chile, O. E. A. , 1984.

McCubbin, H. I. , Larsen, A. y Olson, D. H. (1981): FCOPES. Family crisis Oriented Personal Evaluation Escales. En D. H. Olson, H. I. McCubbin, H. Barnes, A. Larsen, M. Muxen y L. R. Wilson (Eds. ), Family inventories. University of Minnesota, St. Paul.

McCubbin, H. I. , Thompson, A. I. y McCubbin, M. A. (1996). Family assessment: Rsiliency, coping and adaptation. Inventories for research and practice. Madison: University of Wisconsin.

McCubbin, H. I. , Thompson, A. I. y McCubbin, M. A. (1996). Family assessment: Rsiliency, coping and adaptation. Inventories for research and practice. Madison: University of Wisconsin.

Minuchin, S. Familias y terapia Familiar. Barcelona, Editorial Crónica, 1977.

Minuchin, S. Families and family therapy. Cambridge MA: Harvard University Press, 1974.

Morin, E. El método IV: La vida de la vida.

MORIN, E. Introducción al pensamiento complejo. Barcelona: Gedisa, 1996.

MORIN, E. Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. Bogotá: Ministerio de Educación Nacional, 2000, p. 31.

MORIN, Edgar. Conferencia de apertura. Primer Congreso Internacional de pensamiento complejo. Bogotá: ICFES, Noviembre 8 - 10 de 2000, p 36.

MORIN, Los siete saberes necesarios para la educación del futuro, Op. Cit.


Muslow, G. proceso de afrontamiento en una etapa del ciclo vital de las mujeres: La mediana edad. Tesis Doctoral. Universitat de Valencia, 1994.

Olson, D. H. , McCubbin, H. I. et al. Families, what makes them work. California: Sage. 1989 (Or. 1983).

CIRO, R. ; TOBÓN, S. , y FERNÁNDEZ, J. L. El Enfoque Socioformativo Complejo: un modelo pedagógico para la pedagogía social Iberoamericana. Medellín: Contacto Vital, 2002.

Piercy, FP, Sprenkle, DH, et al. Family Therapy Sourcebook. New York, The Guilford Press, 1990.

Quintero Velásquez, Ángela María. Escenarios interdisciplinarios de la familia. Conférence de l’association internationales des écoles de travail social ciudadania y formación de los trabajadores sociales en la mundializacion. France, Julio 15-18, 2002.

Salem, G. Abordaje terapéutico de la familia. Barcelona, Masson, 1990.

Salem, G. Abordaje terapéutico de la familia. Barcelona, Masson, 1990. Las recomendaciones fueron adaptadas por los autores del presente documento a la realidad Colombiana.

Schneider, PB. Propédeteutique d´une psychotherapie. Paris:Payot 1976 (tra cas: propéutica de una psicoterapia. Valencia: Nau Llibres 1979.

Selvini Palazzoli M, Boscolo L, Cecchin G, Prata G. Paradoja y contraparadoja, 2ª edición. Barcelona, Ediciones Paidos, 1991.

SHAZER, S. , Pautas de terapia familiar breve. Un enfoque ecosistémico, Barcelona, Paidós, 1989.

SHAZER, S. , y otros, ««Brief Therapy: Focused Solution Development», Family Process, 1986, 25, pp. 207-221.

Sluzki, CE. Process, structure and world vision: towards an integrated vision of the family therapy systemic models. Family Process 1983; 22: 469-476.

Tobón, Sergio y Fernández Tobón, José Leonidas. psicología y sistema de salud en Colombia. Medellín: ANEPSI, 1998.

Tobón, Sergio y Fernández, José Leonidas. Formación basada en competencias. Medellín: Corporación Contacto Vital, 2003. En prensa.

Tobón, Sergio y Núñez, Ariel. psicología y sistema de salud latinoamericano. En: Revistas Perspectivas en psicología. 2001.

TOBÓN, Sergio, y FERNÁNDEZ, José Leonidas. La familia ante los retos de la competitividad. Medellín: Contacto Vital, 2003.

Tobón, Sergio. Aprender a emprender: un enfoque curricular. Fundación Universitaria del Oriente (FUNORIE), 2001.

Tobón, Sergio; Vinaccia, Estefano; Martínez –Sánchez, Francisco; Sandín, Bonifacio. Factores biopsicosociales en la úlcera péptica duodenal. Revista Latinoamericana de psicología, 2001.

Tobón, Sergio; Vinaccia, Estefano; Martínez –Sánchez, Francisco; Sandín, Bonifacio. estrés psicosocial y factores emocionales en sujetos con gastritis crónica infectados con Helicobacter Pylori. comunicación presentada en el I Congreso Iberomaricano de psicología.
Madrid-España, 1998.

Vinaccia, Estefano; Tobón, Sergio; Martínez-Sánchez, Francisco. Efectos de la psicoterapia cognitiva-conductual grupal en sujetos con dispepsia no ulcerosa. En: Revista Colombiana de Gastroenterología, 2001.

Von Bertalanffy, L. General systems theory. New York: George Brazillier, 1954.

Watzlawick P, Beavin J, Jackson DD. teoría de la comunicación humana. Barcelona, Editorial Herder, 1991.

WATZLAWICK, P. , y otros, La Realidad Inventada. ¿Cómo sabemos lo que creemos saber?, Barcelona, Gedisa, 1988.

Watzlawick, Paul (7ª Ed. ) Cambio. Barcelona: Herder, 1992.

Watzlawick, Paul. (5ª Ed. ) ¿Es real la realidad?. Barcelona: Herder, 1992.

WEAKLAND, J. H. , y otros, «Brief Therapy: Focused Problem Resolution», Family Process, 1974, 13, pp. 141-168.

Bateson, G. , Jackson, D. D. , Haley, J. , & Weakland, J. Toward a theory of schizophrenia. Behavioral Science, 1956, 1, 251-264.


Citas

1 Von Bertalanffy, L. General systems theory. New York: George Brazillier, 1954.

2 Feixas, G. , y Miró, M. T. Aproximaciones a la psicoterapia: Una introducción a los tratamientos psicológicos. Barcelona: Paidós, 1993.

3 Watzlawick P, Beavin J, Jackson DD. teoría de la comunicación humana. Barcelona, Editorial Herder, 1991.

4 Minuchin, S. Families and family therapy. Cambridge MA: Harvard University Press, 1974.

5 Botella, L. Personal construct psychology, constructivism, and postmodern thought. In R. A. Neimeyer & G. J. Neimeyer (Eds. ), Advances in Personal Construct Psychology (Vol. 3). Greenwich, CN: JAI Press, 1995.

6 MORIN, Edgar. Conferencia de apertura. Primer Congreso Internacional de pensamiento complejo. Bogotá: ICFES, Noviembre 8 - 10 de 2000, p 36.

7 MACHADO, Antonio. Caminante, no hay camino. . . Santafé de Bogota: Planeta, 1998, p. 19.

8 MORIN, E. Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. Bogotá: Ministerio de Educación Nacional, 2000, p. 31.

9 Ibid.

10 Cfr. ROZO GAUTA, José. El sujeto en las ciencias sociales. En: MALDONADO, Carlos. Visiones sobre la complejidad. Santa Fé de Bogotá: Ediciones El Bosque, 1999

11 LIZÁRRAGA BERNAL, Alfonso. Formación humana y construcción social: una visión desde la epistemología crítica. En: Revista de Tecnología Educativa. Vol. XIII, no. 2 (1998), p. 156.

12 Para una mayor ilustración sobre este concepto véase por ejemplo CIRO, R. ; TOBÓN, S. , y FERNÁNDEZ, J. L. El Enfoque Socioformativo Complejo: un modelo pedagógico para la pedagogía social Iberoamericana. Medellín: Contacto Vital, 2002.

13 MORIN, E. Introducción al pensamiento complejo. Barcelona: Gedisa, 1996.

14 MORIN, Conferencia de apertura, Op. Cit. , 2000, p. 42

15 Ibid, p. 41

16 GUSDORF, G. Passé, présent, avenir de la recherche interdisciplinaire. Rev. Int. Sci. Soc. , 1977, XXIX (4), pp. 627-648.

17 BOTTOMORE, T. Introduction. En APOSTEL y otros, Interdisciplinarité et sciences humaines, Paris, UNESCO, 1982. Trad. esp. : Interdisciplinariedad y ciencias humanas, Madrid, Tecnos/Unesco, 1983.

18 INGLOTT, Rafael. La cuestión de la transdisciplinariedad en los equipos de salud mental. Rev. Asoc. Esp. Neuropsiq. , 1999, vol. XIX, n. º 70, pp. 209-223. .

19 COMITÉ INTERINSTITUCIONAL DE FAMILIA. Carta de la Transdisciplinariedad. En: El pensamiento complejo y la familia, II Congreso Latinoamericano de Familia Siglo XXI. Medellín, 1998, pp. 17

20 MORIN, Op. Cit. , 1998

21 Morin, E. El método IV: La vida de la vida.

22 Quintero Velásquez, Ángela María. Escenarios interdisciplinarios de la familia. Conférence de l’association internationales des écoles de travail social ciudadania y formación de los trabajadores sociales en la mundializacion. France, Julio 15-18, 2002.

23 Watzlawick, Paul. (5ª Ed. ) ¿Es real la realidad?. Barcelona: Herder, 1992.

24 Watzlawick, Paul (7ª Ed. ) Cambio. Barcelona: Herder, 1992.

25 WEAKLAND, J. H. , y otros, «Brief Therapy: Focused Problem Resolution», Family Process, 1974, 13, pp. 141-168.

26 SHAZER, S. , y otros, ««Brief Therapy: Focused Solution Development», Family Process, 1986, 25, pp. 207-221.

27 MATURANA, H. ; VARELA, F. ; BEHNCKE, C. , Las Bases Biológicas del Entendimiento humano. El árbol del conocimiento. Al pie del árbol, Santiago de Chile, O. E. A. , 1984.

28 WATZLAWICK, P. , y otros, La Realidad Inventada. ¿Cómo sabemos lo que creemos saber?, Barcelona, Gedisa, 1988.

29 ESPINA BARRIO, J. A. , «¿Cómo sabemos lo que creemos saber?», Boletín de la Asociación Castellano-Leonesa de Salud Mental, 1993, 2, pp. 11-16.


Comentarios/ Valoraciones de los usuarios



¡Se el primero en comentar!

La información proporcionada en el sitio web no remplaza si no que complementa la relación entre el profesional de salud y su paciente o visitante y en caso de duda debe consultar con su profesional de salud de referencia.