Postmodernidad y Globalización constituyen dos de las características de la cultura del siglo XXI. Se tiende a una sociedad global, pero acultural, a la uniformidad de lo comercial a través de la ?sociedad de la información? y la cultura icónica. La homogenización de la cultura, impuesta por los medios, exporta internacionalmente el estereotipo estético y el estilo enfermizo de los países poderosos y aumentan las prevalencias de trastornos alimentarios (TCA). Esta ?enfermedad americana? se propaga hacia el este. La epidemia gana terreno, por el peso de la cultura. Las prevalencias de TCA halladas en los países subdesarrollados, en las culturas africanas, asiáticas, orientales, en las minorías raciales estadounidenses crecen poco a poco.
Y nos encontramos con curiosas investigaciones, que confirman la Globalización. Como un estudio entre iraníes de M. Nobakht y M. Dezhkam, con una prevalencia comparable a la hallada en occidente, en nuestros estudios españoles con similar metodología. . El caso de las islas Fiji, estudiado por. Becker es paradigmático. Son unos desórdenes que, cada vez más, deben preocuparnos en todo el mundo. Pues, se extienden, con la Globalización, al ser unos trastornos mediatizados socioculturalmente, que expresan conflictos y tensiones generalizados en la cultura de la Postmodernidad. Para la American Psychiatric Association, en muchos otros países, aparte de EstadosUnidos, se ha producido un incremento general de TCA, incluso en culturas donde dichos trastornos son poco frecuentes . Según Levine estamos en la cuarta etapa de desarrollo de los TCA, en la que se extienden por Sudáfrica, Chequia o Hong-Kong.